Biomédicas, entidad madura y consolidada

Patricia Ostrosky, directora de la instancia universitaria, rindió su informe de actividades 2017

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Con 87 investigadores (tres eméritos, 33 titulares C, 27 B, 16 A y ocho asociados) y 83 técnicos académicos (12 titulares C, 34 B, 21 A y 16 asociados), casi todos integrantes del Sistema Nacional de Investigadores (SNI), el Instituto de Investigaciones Biomédicas (IIBm) se consolida como una entidad madura que genera conocimiento de vanguardia básico, experimental y aplicado.

Ante su comunidad reunida en el Auditorio Alfonso Escobar Izquierdo, la directora del IIBm, Martha Patricia Ostrosky Shejet rindió su informe de actividades 2017, en el que destacó que el año pasado los académicos de la entidad publicaron 211 artículos internacionales indizados y 25 no indizados, con un factor de impacto promedio de 3.44, y más de la mitad de ellos (53 por ciento) tuvieron de dos a cuatro publicaciones por investigador.

Respecto a la docencia, 87 por ciento (76) de los investigadores y 18 por ciento (15) de los técnicos se involucraron en labores de enseñanza de licenciatura y posgrado.

El IIBm, junto con la Facultad de Medicina, es responsable de la Licenciatura en Investigación Biomédica Básica (LIBB), carrera con más de 40 años de antigüedad orientada a la indagación científica, de la que el año pasado egresaron 38 alumnos. Además, en 2017 se celebró la octava reunión de la LIBB.

El Instituto participa en cuatro posgrados, de los que el año pasado egresaron 33 estudiantes de maestría y 19 de doctorado.

Además, en el ciclo que se reporta se hizo la vigésima edición del congreso de carteles Doctor Lino Díaz de León, creado para difundir líneas de investigación que se realizan en el IIBm y motivar el intercambio científico entre alumnos, técnicos académicos e investigadores, por medio de la presentación y discusión de ese tipo de láminas.

Hallazgos relevantes

Ostrosky resumió entre los logros de 2017 el descubrimiento de una proteína que representa un nuevo blanco para el tratamiento del tifus y la brucelosis; así como la demostración de las propiedades de las micropartículas de almidón, que refuerzan la capacidad protectora de la vacuna contra la tuberculosis.

También, subrayó el hallazgo de algunos minerales de arcillas que podrían modificar las fases iniciales o tardías de la inflamación y el edema cutáneo; así como el de que el factor transcripcional SOX2 reprime la región reguladora del virus de papiloma humano, el cual es un elemento de riesgo para el desarrollo de cáncer cervicouterino.

Nuevas instalaciones

En 2017, Biomédicas estrenó su nueva unidad en el Instituto Nacional de Cardiología Ignacio Chávez, e inauguró un edificio en la Facultad de Ciencias (FC) que alberga la Unidad de Toxicología Ambiental del Instituto, el cual trabajará en conjunto con el Laboratorio Nacional de Soluciones Biomiméticas para Diagnóstico y Terapia de la FC y con el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias.

La Unidad de Modelos Biológicos de la entidad obtuvo la acreditación como bioterio autorizado tipo mixto, lo que facilita la adquisición de animales de laboratorio útiles para diversas líneas de investigación. También se abrió la Unidad de Atención Integral a la Mujer en la Estación Científica La Malinche, ubicada en la unidad periférica de Tlaxcala.

En tareas de difusión, la Gaceta Biomédicas, órgano informativo con más de 22 años de existencia y tiraje de cinco mil ejemplares mensuales, se distribuyó en nueve países.

A su vez, los académicos del Instituto tuvieron en 2017 un total de 160 participaciones en los medios de comunicación; 64 vía Internet, 56 en medios impresos, 31 en televisión y nueve en radio.

La titular. Fotos: Víctor Hugo Sánchez y Archivo Gaceta UNAM.
La titular. Fotos: Víctor Hugo Sánchez y Archivo Gaceta UNAM.
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