Universitario excepcional

Camino de una memoria, de Héctor Fernández Varela

Foto: Erik Hubbard.
Foto: Erik Hubbard.

Como un pediatra extraordinario, destacado maestro, hombre de carácter y determinaciones fuertes; padre cariñoso y universitario excepcional es como definen sus colaboradores, familiares y amigos a Héctor Fernández Varela Mejía, en el libro Camino de una memoria.

Se trata de una obra conformada por la autobiografía del actual director general de Atención a la Salud en la UNAM, con una trayectoria de más de 70 años en las aulas y la administración de esta casa de estudios; así como de 31 testimonios de quienes han tenido oportunidad de estar cerca de quien se ha desempeñado como director de la Escuela Nacional de Estudios Profesionales Iztacala, del Instituto Nacional de Pediatría y comisionado nacional de Arbitraje Médico, entre otros cargos.

“El principal motivo de este relato es mi amor por la Universidad Nacional y el honrar a personajes que admiro y con los que he tenido la fortuna de convivir. Hombres y mujeres de gran talento, con la determinación de servir a México”, expresó el médico al presentar su libro, en el auditorio del Museo Universitario Arte Contemporáneo.

Estuvo acompañado de sus seres queridos y personas con quienes ha colaborado, entre ellos el rector Enrique Graue y los exrectores Guillermo Soberón, Juan Ramón de la Fuente y José Narro.

Fernández Varela externó que en su texto narra el privilegio que ha tenido de aportar sus ideas en muy diversos campos: desde la salud pública hasta la administración de servicios, la investigación, la docencia y la pediatría.

Testimonios

Al comentar la obra, José Antonio González Fernández, presidente del despacho González Fernández y quien colaboró con el autor en la Secretaría de Salud federal, expuso que Camino de una memoria es una visión coral sobre un hombre íntegro y congruente. Asimismo, recordó testimonios que se incluyen en el documento.

José Meljem Moctezuma, subsecretario de Integración y Desarrollo del Sector Salud, comentó que el volumen permite acercarse al ámbito familiar de Fernández Varela, quien, dijo, es un forjador de instituciones. Como subsecretario de salud, prosiguió, participó en la revisión de un código sanitario que dio pie a la actual Ley General de Salud; en el Instituto Nacional de Pediatría revitalizó la investigación y la química; y con la puesta en marcha de la Conamed ayudó a implementar un sistema de quejas que hoy goza de la confianza de usuarios y médicos.

Diego Valadés, investigador emérito del Instituto de Investigaciones Jurídicas, indicó que el texto da cuenta de una época de la Universidad Nacional. Recordó la participación de Fernández Varela en el Consejo Universitario: fue una voz contundente y firme que salió en defensa de la institución en momentos complicados. Remarcó también su trabajo para que los universitarios gozaran del seguro facultativo.

El prólogo fue escrito por el rector Enrique Graue, quien expone que Fernández Varela es un hombre satisfecho. “Es un marido y padre amado por su familia, querido por sus amigos, respetado por sus colegas y apreciado por sus colaboradores. Es un ser de convicciones firmes, respetuoso, tolerante y feliz. La suma de todas estas cualidades lo hacen un humano excepcional, invaluable amigo y universitario ejemplar”.

También podría gustarte