Dos cecehacheros del sur, a Taiwán
Participarán en la Taiwan International Sciencie Fair
Curiosidad y la necesidad de preguntar siempre son cualidades de Nirvana Heinze Balcázar y David Díaz de Sandy, del cuarto semestre del CCH Sur, quienes representarán a la UNAM y al país en la Taiwan International Science Fair 2020.
Ganaron su acreditación en la ExpoCiencias Nacional 2018 con la investigación “Degradación de poliestireno a través de la microbiota de Tenebrio molitor y Artemia franciscana”, en Morelia, Michoacán.
Su estudio consiste en que por medio de la microbiota que está dentro de un organismo, el Tenebrio molitor —denominado comúnmente gusano de harina— y una especie de crustáceo, Artemia franciscana, puede efectuarse el proceso de degradación del unicel.
En la nación, de acuerdo con la Asociación Nacional de Industrias del Plástico y la Asociación Nacional de la Industria Química, se calcula que se producen 125 mil toneladas de unicel, y 30 por ciento se consume en Ciudad de México.
“Sólo un plato de unicel, luego de 32 años, se degrada menos de uno por ciento. Con nuestra propuesta, a las cinco semanas se degradó 20 por ciento”, explicó Heinze Balcázar.
Nirvana y David han trabajado desde el primer semestre de bachillerato (ingresaron al programa Jóvenes hacia la Investigación de la Dirección General de Divulgación de la Ciencia) para lograr dichos resultados.
Apoyo de sus asesores
El apoyo de sus asesores, Pável Castillo Urueta y Magali Estudillo Clavería, académicos del CCH Sur, ha sido importante.
Para Castillo Urueta, la necesidad de conocimiento es una parte fundamental de estos alumnos. “Entrega y pasión es de lo que están llenos estos jóvenes, esas cosquillitas por conocer los caracteriza”. Asimismo, el éxito de sus indagaciones se debe a su constancia, refirió Estudillo Clavería.
Nirvana quiere estudiar Medicina y David, Química. Ellos saben que esta investigación es importante “para avanzar como sociedad”.
Aunque aún faltan meses para su viaje a Taiwán, están orgullosos de representar a esta casa de estudios. “Queremos demostrar que somos increíbles, que México puede y que la UNAM es la mejor”, afirmaron.
Finalmente, expresaron que están trabajando “en la caracterización genética para encontrar opciones y escalar a un proceso que no sea dañino para el humano, y que la degradación se pueda hacer a gran magnitud”.
