Sonda exploratoria en el lado oscuro

La misión lunar china abre vías a la investigación

Podría permitir saber cómo se formó el satélite y qué materiales hay en la superficie selenita

Foto: Administración Nacional del Espacio de China.
Foto: Administración Nacional del Espacio de China.

El que la misión lunar china Chang’e 4 haya logrado llevar una sonda exploratoria a la cara oculta de la Luna podría permitir, en un futuro, saber cómo se formó este satélite, estudiar otras galaxias e incluso conocer qué tipo de materiales hay realmente en su superficie, afirmó Julieta Fierro, investigadora del Instituto de Astronomía (IA).

No obstante, apuntó la especialista, debemos reconocer que con este hecho los chinos tienen más interés por exaltar su jerarquía económica, política y tecnológica, que por mostrar algún tipo de hallazgo científico.

En los últimos años, recordó, China ha tratado de expandir su poderío en el mundo, tanto en el ámbito económico como político, y ha encontrado en la exploración espacial otra manera de evidenciarlo, como en su momento lo hicieron los estadunidenses y los rusos.

Realmente no es lo primero que efectúan los chinos en este ámbito, hace poco pusieron un satélite en órbita para mandar señales encriptadas a la Tierra; la anterior fue una gran proeza porque mostraron al orbe que son capaces de comunicarse desde el espacio de manera segura, destacó.

Van con todo

Con esta reciente misión espacial, China también demostró que “está entrando con todo a las nuevas tecnologías, la inteligencia artificial, la robótica, así como las comunicaciones, pues fueron capaces de poner un pequeño satélite del otro lado de la Luna”, indicó.

Ésta siempre nos da la misma cara y el otro lado no lo podemos ver desde la Tierra; sin embargo, conocer este aspecto no es nuevo porque desde mediados del siglo pasado se cuenta con fotos de esa parte lunar, mencionó.

Ese lado es más cacarizo porque ahí caen meteoritos y hacen hoyos, en cambio en el que vemos nosotros surgió lava y los tapó, explicó.

Entonces, abundó, lo que hicieron los chinos fue poner su satélite en la cara oscura, con una enorme precisión, y después mandaron sondas. La justificación científica es que lo colocaron en un lugar donde hay un cráter de impacto muy grande, lo cual dejó expuesta la superficie lunar original.

“Se piensa que en este sitio de la Luna hay rocas muy antiguas que podrían ayudar a determinar cómo se formó este satélite. Al respecto hay dos teorías: la primera es que se formaron al mismo tiempo la Luna y la Tierra; la otra, habla de la posibilidad de que cuando la Tierra era muy joven un mundo tipo Marte chocó contra ella y aventó al espacio mucha materia y de ésta se formó un disco alrededor de nuestro planeta, que después se unió y dio origen a la Luna”, detalló Julieta Fierro.

La astrónoma comentó que ha habido varias misiones Chang’e. “Se planea hacer más de 20 pero ya en las últimas los chinos quieren llevar personas”, informó.

Otros objetivos

La actual misión tiene un carrito mediante el cual se recabarán piedras que serán analizadas en el espacio para ver qué tipo de minerales hay en la Luna. Con ello, se pretende saber si éstos sirven para construir sitios para que vivan astronautas allá y tal vez tener misiones que posteriormente despeguen desde ese satélite natural.

Esto, agregó, también daría la posibilidad de poner telescopios del otro lado del satélite. “Como no hay brillo sobre esa cara lunar, la obscuridad permitiría hacer muchas más observaciones espaciales cuando sea de noche en la Luna, porque el lado oscuro de ésta también tiene días y noches”, puntualizó.

Algo más que buscarán estas hondas Chang’e será un gas llamado Helio 3 que en la Tierra, en el futuro, podría ser utilizado como combustible, concluyó

También podría gustarte