“Amo el futbol y me divierto mucho jugando”

Desde su debut con Pumas, el 13 de enero, suma siete partidos disputados, todos como titular, con una cosecha de 519 minutos

Foto: Club Universidad Nacional.
Aunque siempre deseó ser futbolista profesional, no pensó que todo pasaría tan rápido. El pasado 13 de enero Michelle González debutó como jugadora de Pumas en la Liga MX Femenil, 29 días después de graduarse en la Dallas Baptist University, tal y como se lo prometió a sus padres.

La originaria de Texas, Estados Unidos, desde pequeña mostró interés por el balompié. Impulsada por sus padres, empezó a jugar desde los cuatro años en equipos pequeños y escolares. Con el paso del tiempo, su gusto por el futbol fue en aumento. Alternó por años los campos y las aulas hasta lograr su sueño: ser futbolista profesional, luego de que se presentó la oportunidad de llegar a Pumas femenil.

“A los 10 años empecé en un club y me quedé ahí hasta que terminé la prepa. Después, quería jugar profesional, pero mis papás me dijeron que era mejor que primero estudiara algo. Fui a un colegio y me gradué. Cuando lo hice, el 15 de diciembre, no sabía cuál era mi futuro y llegué aquí el 17. Fue algo muy rápido. Pumas fue el primer club que me abrió las puertas a mi carrera profesional y estoy agradecida por eso”, afirmó la jugadora universitaria de 23 años.

Los cambios de país, de vida e idioma no lucían sencillos, y el desafío requería esfuerzo y sacrificio. A su llegada a Cantera, Michelle se planteó el primer gran objetivo: ser titular en el equipo que dirige Marcello Frigério. La adaptación llegó rápido, con trabajo y dedicación en cada entrenamiento, en cada jugada planteada por el entrenador.

El 13 de enero, en el duelo ante Tigres, en el Estadio Olímpico Universitario, González lo consiguió: fue parte del 11 inicial del conjunto auriazul. “Siempre les digo a todos que ese día, por primera vez, no me puse nerviosa. Me dio mucha alegría. No lo podía creer. Salí al campo y había cámaras, afición. Me sentí como una futbolista profesional, y sí, lo soy. Es algo que me enseña que el trabajo tiene recompensa. Ser titular representa algo importante y sé que me tengo que enfocar mucho”.

Desde aquel primer duelo suma siete partidos disputados, todos como titular, con una cosecha de 519 minutos. Tiene hambre, ganas de trascender. Desde pequeña entendió que todo sueño requiere esfuerzo y compromiso. Ya como futbolista profesional no baja los brazos, quiere consolidarse, mantenerse en el primer cuadro el resto de la campaña y apunta a lo más alto. “Uno de los objetivos era ser titular y ahora quiero ganar un título en un futuro cercano”.

El equipo femenil universitario ocupa la posición 10 de la tabla general del Clausura 2024, con 10 unidades, sólo una menos que el octavo lugar (Puebla), por lo que los siguientes enfrentamientos serán claves para que las auriazules puedan clasificar a la liguilla, instancia que disputaron el torneo anterior.

Desde su llegada a la dirección técnica del equipo, Frigério se ha enfocado en potenciar las cualidades técnicas de sus futbolistas y en Michelle encontró algunas características en su forma de juego para cambiarla de posición. González dejó de ser 10 y ahora acompaña a Dania Padilla en la contención, posición en la que ha demostrado solidez y entrega, por el sueño cumplido, los nuevos retos a superar y esa pasión por el futbol que la impulsa cada día a ser mejor.

“Antes jugaba de 10 y en el último año me pusieron de extremo. Creo que en todo lo que hago aquí voy a dar mi cien. Espero que cuando me vean en la cancha se den cuenta de que amo el futbol y me divierto mucho jugando”.

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