Tanto en México como en el mundo
Causan seis patógenos mayoría de decesos asociados a resistencia antimicrobiana
En la UNAM se reunieron expertos para generar propuestas que permitan mitigar el crecimiento de ese fenómeno, con el objetivo de que sus impactos sean menores
En México como en el resto del mundo seis patógenos causan un alto y creciente número de fallecimientos asociados a resistencia antimicrobiana, por lo que especialistas de la Red del Plan Universitario de Control de la Resistencia Antimicrobiana (PUCRA), de la UNAM, buscan generar propuestas para mitigar el crecimiento de esta problemática y que sus impactos sean menores.
Durante la inauguración del Seminario del Plan Universitario de Control de la Resistencia Antimicrobiana (PUCRA) 2024, el coordinador del Programa Universitario de Investigación sobre Riesgos Epidemiológicos y Emergentes (PUIREE), de esta casa de estudios, Samuel Ponce de León Rosales, explicó que de 2017 a 2023 los miembros de la Red han analizado más de 41 mil muestras de bacterias resistentes a antibióticos obtenidos de sangre (bacteriemia). De estas el 75 % son Gram negativas y el 25 % Gram positivas. Además, se suman cerca de 300 mil aislamientos de bacterias de urocultivos (en orina) de los cuales el 90 % es Escherichia coli (E. coli) y el resto Klebsiella pneumoniae (K. pneumoniae).
El universitario recordó que para este trabajo se cuenta con la colaboración de unos 60 hospitales en 15 estados de la República mexicana, cuya labor ha sido fundamental para elaborar el perfil de la resistencia antimicrobiana en el país.
Ponce de León Rosales comentó: “Entendemos que controlarla y erradicarla es imposible, es algo que ocurre normalmente, ya sea que se prescriban bien o mal los medicamentos. Mientras mayor sea la población en el mundo más antibióticos se usarán; lo que podemos hacer en medicina es tratar de recetarlos de manera óptima”.
En la Unidad de Seminarios Dr. Ignacio Chávez, el investigador estimó que más allá de conocer las tasas de resistencia, el encuentro académico permitirá generar propuestas para actuar contra este problema, intensificando la creatividad, el diálogo con legisladores e insistiendo en la atención en la materia.
Reporte de actividades
A su vez, la coordinadora de actividades del PUCRA, María Guadalupe Miranda Novales, quien también fue la responsable de presentar el reporte de la Red PUCRA 2017-2023, precisó: “Los aislamientos con los que se cuenta provienen de muestras de sangre debido a que es un líquido estéril y refleja una infección; pero también hay urocultivos que revelan lo que pasa en las infecciones de la comunidad”.
Publicaciones internacionales destacan que seis patógenos ocasionan el 73 % de los fallecimientos asociados a resistencia antimicrobiana: E. coli, Staphylococcus aureus (S. aureus), K. pneumoniae, Streptococcus pneumoniae; Acinetobacter baumannii (A. baumannii) y Pseudomonas aeruginosa (P. aeruginosa). A esto se tienen que sumar los fallecimientos por tuberculosis resistente, que al menos en 2022 ascendieron a alrededor de 1.3 millones en el orbe, recordó.
En ocasión de la Semana Mundial de la Concientización sobre la Resistencia a los Antimicrobianos 2024, la investigadora puntualizó que en México, como en todo el mundo, E.coli es el organismo que se aísla con mayor frecuencia en sangre y orina; en segundo lugar, S. aureus.
Miranda Novales subrayó: “Tenemos un problema importante por la resistencia a las cefalosporinas de tercera y cuarta generación, y en las fluoroquinolonas es elevada para E.coli y K. pneumoniae”. Durante 2022 y 2023 se registró un aumento en la resistencia lo cual puede ser un efecto de la pandemia y el uso de antimicrobianos en esos años. El reto es más grave en el tratamiento de estas dos bacterias en infecciones urinarias, pues las opciones son menores.
En el caso de P. aeruginosa, prosiguió, si bien los aislamientos no revelan una resistencia tan elevada, sí se tiene un aumento en la categoría de las pandrogoresistentes, lo que representa un reto para el tratamiento de estas infecciones.
A. baumannii, concluyó, sigue siendo la que tiene la resistencia más elevada a los antibióticos disponibles.