Autismo, reto para la salud pública y para la inclusión

Se estima que en México una de cada 115 personas tiene autismo, lo cual representa un reto de salud pública; Las tecnologías de asistencia, aún fuera del alcance de la mayoría

En México, 1 de cada 115 niños padece autismo, según la estimación de un estudio de prevalencia difundido por la Secretaría de Salud, realizado por científicos financiados por la organización Autism Speaks.

Según este estudio, realizado en 2016 en León, Guanajuato, que permite hacer una estimación de los casos en el país, casi 1% de todos los niños en México, alrededor de 400 mil tienen autismo. Éste es el primer estudio de prevalencia hecho en territorio nacional, por lo que no se puede comparar con años previos. En Estados Unidos, en 1996 se pensaba que el autismo afectaba a uno de cada mil o menos niños. Según esta estimación, serían 400 mil niños los que tienen autismo en México, lo que representa un reto en materia de salud pública.

La Asamblea General de la ONU declaró el 2 de abril como Día Mundial de la Conciencia sobre el Autismo para concientizar a la población sobre necesidad de contribuir a la mejora de la calidad de vida de las personas con autismo, y que puedan llevar una vida plena, gratificante

El autismo es un trastorno del espectro neurológico, caracterizado por dificultades en las relaciones sociales, alteraciones de la capacidad de comunicación, y patrones de conducta estereotipados, restringidos y repetitivos.

Según la ONU, en casos agudos de autismo es frecuente la discapacidad intelectual; sólo el 30% preservan un coeficiente intelectual normal o superior. Esto conlleva en la mayoría de los casos a un alto nivel de dependencia social y familiar.

En los últimos años, ha aumentado la conciencia y sensibilidad hacia el autismo en todo el mundo. En 2015 se estableció que ninguna persona quedaría fuera de la agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible; en este contexto, la participación de las personas con autismo como agentes y beneficiarios es esencial para la realización de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

El acceso a las tecnologías de apoyo asequibles es indispensable para que personas con trastornos del espectro autista puedan ejercer sus derechos humanos básicos y participar plenamente en la vida de sus comunidades. La tecnología de apoyo puede reducir o eliminar las barreras a su participación en igualdad de condiciones.

Según cifras del organismo internacional, más del 50% de las personas con cualquier tipo de discapacidad que requieren dispositivos de asistencia no pueden recibirlos.

En septiembre de 2018, el Secretario General de la ONU lanzó una estrategia sobre Nuevas Tecnologías, cuyo objetivo es definir cómo el sistema de las Naciones Unidas fomentará el uso de estas tecnologías para acelerar el logro de la Agenda 2030.

2019 es el año que se celebra el Día Mundial de Concientización sobre el Autismo. La ONU se centrará en impulsar el uso de las tecnologías de apoyo para las personas con autismo y se promoverá la igualdad, la equidad y la inclusión.

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