Concierto en la Sala Nezahualcóyotl
Celebra Orquesta Juvenil el 90 aniversario de la creación de Cri-Cri
Estará bajo la batuta de Gustavo Rivero Weber; César Piña fungirá como director de escena, y participa la cantante Sara Emilia
La música de Francisco Gabilondo Soler es parte del imaginario popular de la sociedad mexicana de forma indeleble gracias a la amplia variedad de estilos que conforman su repertorio, que va desde el bolero hasta el tango, así como personajes entrañables que son recordados por varias generaciones.
La Orquesta Juvenil Universitaria Eduardo Mata (OJUEM), con Gustavo Rivero Weber como director artístico, ofrecerá el concierto infantil Sueños del Grillito Cantor. 90 aniversario, el 18 de agosto en la Sala Nezahualcóyotl del Centro Cultural Universitario, en conmemoración del entrañable personaje creado por Francisco Gabilondo Soler.
Participarán César Piña, director de escena, así como la cantante Sara Emilia. Durante el recital aparecerán algunos de los personajes creados por el compositor mexicano, para acompañar los temas elegidos en esta ocasión, entre ellos “Caminito de la escuela”, “Baile de los muñecos, “El Ratón Vaquero” y “Una gatita llamada Tutú”.
En los años 30, Francisco Gabilondo Soler compuso algunas canciones para sus hijos como mero entretenimiento, pero esta experiencia lo llevó a descubrir la alegría y felicidad que causaba su música a los niños. Así, creó a Cri-Cri, el Grillito Cantor. En 1932 incursionó en un programa de radio llamado El Guasón del Teclado. En octubre de 1934 lanzó una segunda emisión dedicada a los niños, a sugerencia de su esposa Rosario, el cual permaneció al aire por 27 años.
Gustavo Rivero Weber detalló que la canción “Una gatita llamada Tutú” fue incluida porque “nadie la conoce, ni siquiera se puede encontrar en YouTube, así que en ocasión del aniversario se convierte en una excelente oportunidad para escuchar un tema inédito, que es una propuesta de la cantante Sara Emilia”.
El concierto “es muy interesante porque resalta la genialidad del compositor, uno de los más grandes que ha dado México, pues aunque sus canciones son para el público infantil, el trabajo que realizó no fue menor: abarcó una amplia gama de estilos para crear temas únicos, cada canción es diferente, van del tango a la jota española, lo cual resulta en verdad impresionante; todo lo desarrolló al nivel de autores como José Revueltas o Manuel M. Ponce”.
En los años setenta, Francisco Gabilondo Soler se mudó a San Miguel Tocuila, Estado de México, donde disfrutó de observar las estrellas con ayuda de un telescopio, una de sus pasiones, hasta el final de sus días, el 14 de diciembre de 1990. Compuso 263 canciones.
El primer programa de los Conciertos de Verano 2024 de la OJUEM presenta una selección de los temas que dieron a conocer a Cri-Cri en su programa de radio, con arreglos hechos especialmente para la ocasión, a cargo de Juan Duarte y Omar Guzmán.
La vida en la radio de Cri-Cri lo convirtió en una figura icónica de la música infantil en México. “Este concierto conmemora los 90 años del personaje, porque como proyecto cultural, a la Orquesta, y a la UNAM, desde luego, nos interesa que se siga conociendo su música. Además, no es sólo para niños, a los grandes les gusta muchísimo”.
Su música “jamás pasará de moda. Aunque hablamos de canciones infantiles, cada una de ellas resulta en verdad fascinante, no te cansas de escucharlas. Y, como ha permanecido por nueve décadas, son muchas las generaciones de mexicanos que crecieron con ellas, así que poseen un significado particular para todos nosotros”.
Será la segunda ocasión que la Orquesta interpretará las canciones de Cri-Cri, sólo que ahora contará con nuevos arreglos para los temas seleccionados. “Será sólo una fecha”, dijo el director, “pero estamos seguros de que el público volverá a agotar las localidades. Además, el recital de 2023 lo pueden encontrar en Youtube y disfrutarlo cuantas veces quieran, así nos sumamos al boom del acceso a la música vía streaming”.
Los arreglos para estas canciones se escribieron especialmente para la OJUEM, siguiendo exactamente las armonías que escribió Francisco Gabilondo Soler.
“En la época en que fueron compuestas, imagino que por falta de recursos tuvo que trabajar con un grupo muy pequeño de músicos. Al hacer que los temas, maravillosamente escritos, sean interpretados por una orquesta adquieren nuevas dimensiones. El trabajo de los arreglistas es impecable; el público escuchará a Cri-Cri de una forma muy bella”.