Crea Química proteínas contra bacterias de alta mortalidad
Este desarrollo biotecnológico obtuvo el segundo lugar del Programa para el Fomento al Patentamiento y la Innovación 2019
A partir de ingeniería genética, investigadores de la UNAM obtuvieron péptidos, proteínas de bajo peso molecular, que inhiben el crecimiento de la bacteria patógena Listeria monocytogenes, que puede estar en áreas donde se procesan alimentos y transmitirse a los humanos mediante productos lácteos, pescados, embutidos y vegetales, entre otros.
Y registraron la patente “Bacteriocinas recombinantes con acción antilisterial” ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), pues estas proteínas pueden usarse para preparar agentes de limpieza que sean utilizados en la industria de alimentos, comedores industriales o de espacios donde se realiza la ordeña para preparar productos lácteos, explicó la profesora e investigadora de la Facultad de Química (FQ), Maricarmen Quirasco Baruch.
La Listeria monocytogenes, dijo, causa listeriosis, enfermedad con una tasa de mortalidad de 20 a 30 por ciento, alta en comparación con otras afecciones transmitidas por alimentos (ETA). Afecta a grupos de alto riesgo como mujeres embarazadas, recién nacidos, adultos mayores o personas inmunocomprometidas.
En 2010 fue la tercera causa de muerte relacionada con ETA en Estados Unidos (mil 662 casos y 266 muertes). En México no se cuenta con estadísticas epidemiológicas precisas que permita evaluar su impacto, pero debido a la gravedad de la infección, en las normas alimentarias se establece que debe estar ausente.
Quirasco Baruch y sus alumnos del posgrado de Ciencias Bioquímicas también obtuvieron el segundo lugar del Programa para el Fomento al Patentamiento y la Innovación (Profopi 2019), organizado por la Coordinación de Innovación y Desarrollo, y cuyas investigaciones son evaluadas por especialistas externos a la UNAM que consideran parámetros de factibilidad técnica, atracción para el mercado, prospección de negocios e impacto social.
Pueden usarse para preparar agentes de limpieza que sean utilizados en la industria de alimentos, comedores industriales o de espacios donde se realiza la ordeña para preparar productos lácteos”
Maricarmen Quirasco | Facultad de Química
“Lo que buscamos proteger con la patente son secuencias de ADN que no se habían reportado ni estudiado con anterioridad. Las clonamos y expresamos en Escherichia coli con la producción de péptidos capaces de matar a la bacteria Listeria monocytogenes.
“Estos péptidos se ubican en la membrana del microorganismo que van a matar, hacen poros a través de los cuales salen compuestos intracelulares y la célula acaba muriéndose”, abundó la académica del Departamento de Alimentos y Biotecnología de la FQ.
Los péptidos podrían usarse para elaborar espráis, líquidos o toallas húmedas para limpiar las tetillas de las ubres de las vacas, previo a la ordeña.
“También pueden elaborarse películas de recubrimiento para carne u otros productos que incluyan las bacteriocinas. En un futuro podrían incluirse en la formulación de alimentos como un aditivo, aunque para esto es necesario realizar pruebas de inocuidad y verificar que no sean tóxicas para los humanos”, comentó la especialista.
Registro
Quirasco Baruch indicó que ni ella ni sus alumnos, quienes son también autores de la patente –Alejandra Escobar Zepeda, Alfredo Esquivel López y Eduardo Serrano Maldonado– pensaron proteger los resultados de sus investigaciones, desde sus inicios. “Fue posible conforme nos dimos cuenta que estábamos encontrando algo nuevo. Ahora creemos que podrían patentarse otros aspectos de los análisis bioinformáticos y metagenómicos que tenemos y que queremos seguir haciendo con otros productos”.
La académica mencionó que el registro de su patente es ejemplo de que en las diversas áreas del quehacer científico de la UNAM se realizan investigaciones relevantes, innovadoras y de interés industrial.