Creación de la alumna Montserrat Pérez

Libro en Braille sobre la percepción del color

El propósito es fomentar la inclusión de personas con discapacidad

Las personas invidentes pueden tener una relación con los colores: ya sea si en algún momento contaron con el sentido de la vista y recuerden la gama que existe, o si nunca lo han tenido ni lo podrán tener conozcan las sensaciones que se perciben por medio de ellos.

A eso esta destinado Percepciones del color, libro escrito en forma tradicional y en sistema Braille por Montserrat Abigail Pérez López, alumna de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Aragón.

En su trabajo registra una serie de definiciones que personas invidentes le dijeron acerca de cómo se relacionan con el color. ¿Para ti qué es el color?, les preguntó, y escuchó respuestas bellas y sorprendentes que plasmó en su libro; “alguien me dijo: ‘son las notas musicales y, después de una lluvia, es el arcoíris’”.

El color azul, por ejemplo, “es la combinación entre el cielo y el mar, huele a lavanda; el rojo es el sabor a cereza y tiene aroma a rosas; el verde es el pasto mojado, con olor al bosque húmedo; el violeta sabe a vino; el blanco es como una nube, aunque no la puedo tocar me imagino que se siente como el algodón; el negro es el anochecer, la oscuridad, en donde el silencio perdura y se queda”.

Percepciones del color está estructurado en tres apartados: en el primero, titulado “La tranquilidad”, se definen y describen los colores primarios (azul, rojo, amarillo); en el segundo, “La intensidad”, son reportados los colores secundarios (verde, morado y anaranjado), y en el tercero, “La dualidad”, los colores neutros (blanco, negro y gris).

“Se retomó la idea de El libro negro de los colores, de Rosana Faría, trabajado y enriquecido con testimonios de personas de la organización Paseo a Ciegas, AC, y alumnos de la misma FES Aragón”, aclaró la autora.

De esta manera, con imágenes alusivas en relieve, hechas a base de láser, que pueden ser tocadas, la obra –diseñada por Alan Carreño, egresado de la Facultad de Artes y Diseño– es una herramienta que fomenta la inclusión. “La percepción del color es subjetiva, pero en esa subjetividad se encuentran todas las sensaciones que los colores pueden provocar, dijo la alumna del séptimo semestre de Comunicación y Periodismo.

El color en Braille

“Desde niña me ha gustado dibujar, siento que el color es algo más que un concepto, algo químico y físico, por eso estudié Artes Plásticas en la Escuela de Iniciación
Artística del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura, previo a cursar Comunicación y Periodismo en la Universidad Nacional”, compartió Montserrat Abigail.

Como alquimista de la palabra, ahora busca materializar el color para que pueda sentirse. El cerebro humano se ha adecuado al libro durante siglos y en su forma tradicional estimula todos los sentidos, pero Percepciones del color se lee con las manos.

Fotos: Víctor Hugo Sánchez.

Montserrat sincretiza bondad e inclusión, todos se asoman y caben en su gigantesca vocación de ayuda. Su sentido de la adaptación lo aplica en ella misma, con un carrito eléctrico que la apoya para moverse. “La discapacidad que tengo se conoce como personas de talla baja, que a veces causa displasias”, señaló.

“Muchos dicen que las barreras nos las ponemos nosotros, yo considero que no hay ninguna, porque vivimos en un mundo tan avanzado que cualquiera que sea el problema, seguro tiene una solución; y no pondré excusa alguna para limitarme. Mi sueño es trabajar en una editorial, me gustaría desarrollar más proyectos de libros en Braille, y escribir…escribir”.

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