Es parte de la iniciativa Territorios del saber
Difunde cortometraje colecciones del Instituto de Biología
Muestra acervos que están en las instalaciones de la entidad y en el Pabellón Nacional de la Biodiversidad
Para difundir algunas de las colecciones de animales, plantas y hongos que forman parte del acervo científico del Instituto de Biología (IB), se presentó el primer capítulo de la iniciativa Territorios del saber, con un cortometraje de 16 minutos de duración que da a conocer algunos de esos tesoros.
El material, conducido por el académico Parsifal Islas Morales, recorre las colecciones desde sus acervos en las instalaciones del IB, así como en algunos espacios del Pabellón Nacional de la Biodiversidad, que muestra múltiples ejemplares.
El cortometraje es el primero de varios que se presentarán próximamente, y aborda el patrimonio científico de las colecciones nacionales de Anfibios y Reptiles, de Helmintos, de Peces, la histórica del Herbario Nacional, así como las colecciones de Briofitas, de Hongos y de Animales de Cristal Blaschka, que son modelos en vidrio de la vida marina, creados en el siglo XIX por Leopold y Rudolf Blaschka, padre e hijo artesanos de ese material.
Desde diciembre de 2022 el IB alberga la Cátedra UNESCO de Diplomacia y Patrimonio de la Ciencia, formada por un grupo de académicos que buscan hacer del patrimonio científico un objeto de investigación multidisciplinaria, seguros de que la ciencia es una parte valiosa de nuestra cultura e historia social como mexicanos, afirmó Susana Magallón Puebla, directora del IB.
Durante la presentación del material de divulgación en la sala multimedia del Pabellón Nacional de la Biodiversidad, agregó que visibilizar esta identidad científica es el objetivo de Territorios del saber, que encabeza el equipo de la Cátedra UNESCO y cuyo primer material en formato de cortometraje se dio a conocer junto con un conversatorio en el que participaron algunos de los curadores de las colecciones.
La directora del IB narró que, durante más de 90 años, esa entidad ha alojado y preservado las colecciones biológicas nacionales, muchas de ellas heredadas de instituciones centenarias que ya no existen, como el Instituto Médico Nacional y la Cátedra de Botánica del Palacio Nacional.
“Este acervo de origen, así como la expansión continua de sus colecciones, han contribuido a la consolidación del IB como una institución de referencia y excelencia académica internacional”, aseguró Magallón Puebla.
Dijo que el cortometraje es un homenaje a los tesoros del patrimonio científico del IB, y además permite acercarse a los testimonios de los curadores que participaron en las entrevistas y compartieron su visión del desarrollo histórico de las disciplinas biológicas en la Universidad.
Entre la información que los curadores ofrecen en el documental destaca que la Colección Nacional de Helmintos (gusanos parásitos), fundada en 1932, consta de 37,500 ejemplares de 1,690 especies, con 417 ejemplares de México; y que la Colección Nacional de Peces es una de las más importantes del país, con cerca de 14,000 ejemplares de aguas profundas y de la costa marina, así como de lagos, ríos, humedales, deltas y estuarios de México.
En tanto, se da a conocer que el Herbario Nacional custodia la colección más importante de plantas mexicanas, y con más de 1 millón 300,000 ejemplares es el herbario más grande del país y de América Latina, además de ser uno de los diez sitios de su tipo más activos del mundo.
Es un homenaje a los tesoros del patrimonio científico del IB, y además permite acercarse a los testimonios de los curadores”
La Colección Nacional de Briofitas incluye 52,000 ejemplares de estas plantas provistas de unas estructuras parecidas a tallos, hojas y raíces, pero sin vasos. Son terrestres, pequeñas y viven en ambientes húmedos. En tanto, la Colección Nacional de Hongos cuenta con 30,000 ejemplares.
Posteriormente a la exhibición del documental hubo un conversatorio moderado por Patricia Magaña Rueda, responsable de Difusión del IB, con los curadores Gerardo Salazar Chávez, Alejandro Oceguera Figueroa, Elvira Aguirre Acosta y Edna Naranjo García, quienes invitaron a mantener la curiosidad y la capacidad de asombro ante estos tesoros que resguarda la Universidad.