Topógrafo corneal cónico compacto

Dispositivo óptico para ayudar a comunidades lejanas

Se adapta a la tecnología celular; desarrollo del Instituto de Ciencias Aplicadas y Tecnología

Personas en comunidades alejadas de las grandes ciudades podrían recibir apoyo especializado para saber si tienen problemas de ojo seco o queratocono gracias a un topógrafo corneal cónico compacto, desarrollado por Manuel Campos García, del Instituto de Ciencias Aplicadas y Tecnología (ICAT).

El equipo, que funciona con la misma precisión que los que hay en el mercado, será patentado por el especialista, quien ya ha diseñado otros similares.

La idea es que oftalmólogos lleven el dispositivo a sitios lejanos para revisar a las personas, tomen imágenes del ojo con un teléfono celular y compartan la información con sus pares, para tener un diagnóstico más exacto, detalló.

Revisando la superficie del ojo

La córnea es una película transparente que permite que el iris, la pupila y la cámara anterior del ojo enfoquen las imágenes correctamente. Si por cuestiones naturales o ambientales cambia o se deforma, el individuo deja de percibir correctamente lo que pasa a su alrededor.

Los topógrafos corneales son instrumentos especializados utilizados por oftalmólogos en todo el mundo con el propósito de examinar la superficie de la córnea y detectar si ésta presenta algún tipo de daño.

La UNAM, como parte de sus aportes, diseñó hace tiempo un topógrafo corneal, mejor conocido como TOCO.

A su vez, Campos García ha trabajado ya en sistemas que mejoren el diagnóstico y que aprovechen las tecnologías disponibles para muchos.

De ahí que el experto del Laboratorio Nacional de Óptica de la Visión creó nuevos topógrafos, el más reciente de ellos permite aprovechar los sistemas de visión tridimensional, así como teléfonos celulares inteligentes.

El equipo permite amplificar la imagen del ojo. Foto: Fransico Parra.
El equipo permite amplificar la imagen del ojo. Foto: Fransico Parra.

“Desarrollé uno corneal cónico que en vez de utilizar un cilindro (como el TOCO) usa un cono –de ahí su nombre– que cubre cierta superficie de la córnea, pero queríamos hacer algo más pequeño, así que creamos un nuevo prototipo y encontramos que cubre más superficie corneal”, abundó.

Del tamaño de un teléfono celular, el dispositivo cuenta con un sistema de iluminación LED (acrónimo en inglés de Light Emitting Diode, o Diodos emisores de luz) que tiene un sistema de puntos parecidos a elipses que, al ponerse frente al ojo, refleja la imagen y es posible ver su estructura.

El equipo, al ser empatado con la cámara del teléfono celular, de una tableta o una cámara pequeña, posibilita, literalmente, amplificar la imagen del ojo y ver si hay algún tipo de daño en las estructuras.

“Cuando las imágenes se reflejan en la córnea sana, los patrones lucen espaciados y perfectos, pero si existen pequeñas deformaciones locales es posible ver elipses o manchas deformes, por ejemplo si alguien tiene queratocono o ya sufrió un trasplante de córnea”, precisó.

Los dos topógrafos realizados por el grupo de Campos García han sido probados por estudiantes de física médica, pero ahora al equipo de expertos le interesa, especialmente, hacerlo con personas que padecen queratocono, además de ojo seco.

En ambos casos se han comparado las mediciones hechas con estudiantes de Física Médica con equipos comerciales y se observa que los resultados son muy similares, con la ventaja adicional que el instrumento creado en la Universidad Nacional es completamente desarrollado en México y evita la dependencia del extranjero para refacciones o arreglos.

El siguiente objetivo del equipo del ICAT, además de integrar los sistemas de adquisición de imagen en un solo sistema compacto, similar a los visores tridimensionales para videojuegos, es elaborar la patente, así como ver opciones de transferencia de esta tecnología.

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