Plan de trabajo 2024-2028 de Ana Elena Escalante
El Instituto de Ecología mantiene su compromiso de vinculación con la sociedad
El Instituto de Ecología (IE) de la UNAM tiene una historia de liderazgo académico nacional e internacional, y un compromiso explícito con la generación de conocimiento y su vinculación con la sociedad. Hoy, esta entidad busca no sólo mantener esa posición, sino mejorarla, afirmó su directora, Ana Elena Escalante Hernández.
Al hablar de su plan de trabajo al frente de esa instancia para los próximos años (2024-2028), refirió que se dirige a una transformación “de cómo nos organizamos y cómo trabajamos” a través de cinco ejes rectores.
“El primero de ellos, detalló, es investigación e impacto científico, con el que nuestra aspiración es revisarnos y renovarnos en cuanto a las líneas de investigación que se cultivan, la manera en la que nos evaluamos académicamente y cómo, mediante tal revisión, podemos mantener nuestro liderazgo académico e incrementarlo”.
En seguida se impulsará una vida académica comunitaria más sólida, con la ayuda de la diversificación de espacios de interacción, es decir, que no haya únicamente seminarios institucionales, sino que se abra la puerta a foros, mesas redondas, coloquios y reuniones que lleguen a toda la comunidad, desde estudiantes y académicos hasta investigadores posdoctorales, e inclusive a personas fuera del ámbito del personal asociado al IE, y de este modo potenciar lo que hacemos aquí y fortalecer nuestra vida en los cuerpos colegiados, “conocernos más, platicar más”.
Asimismo, con el tercer eje, docencia y formación de recursos humanos, se busca hacer más fuertes –o incluso crear en algunos casos– los nexos con el sector estudiantil de todos los niveles; por ejemplo, con la licenciatura “hemos perdido un tanto el vínculo”, por lo que se planea atraer cursos a las instalaciones del Instituto.
Escalante Hernández anunció que se fortalecerá la Coordinación de Docencia y Formación de Recursos Humanos en términos no sólo de lo que hace, sino de su vínculo y comunicación con los alumnos, y propiciar así que la Dirección reciba de modo más claro el sentir o las necesidades estudiantiles.
Además se reforzarán los programas de becas mediante la búsqueda de fuentes de financiamiento, así como de alternativas para proporcionar apoyo psicológico y emocional a los estudiantes mediante el programa ESPORA (Espacio de Orientación y Atención Psicológica) de la UNAM.
El cuarto eje, continuó Ana Escalante, es la vinculación vista no sólo como contacto con el exterior, sino también al interior, y que consistirá en favorecer más la cohesión del Instituto y fortalecer hacia afuera alianzas estratégicas.
Para lograrlo se instrumentarán estrategias de comunicación internas más claras y se fortalecerán las capacidades para la puesta en marcha de proyectos desde las secretarías Administrativa, Técnica y de Gestión, y Académica, es decir, se articularán mejor los esfuerzos de esas tres instancias.
Por último, el quinto eje es el de administración e infraestructura. Ahí “el reto que tenemos y que queremos resolver es seguir facilitando los procesos de gestión a través de inversión en desarrollo de plataformas informáticas, que ayuden al personal académico a realizar sus trámites académico-administrativos de manera más eficiente y menos tortuosa”.
A fin de conseguir tal meta se buscará el apoyo de la administración central de la Universidad en términos de recursos financieros y de capacidades técnicas, bajo los principios de transparencia, eficiencia y sostenibilidad.
En la misma área, abundó la directora, “queremos impulsar una actualización de la infraestructura, también bajo dichos principios, porque el IE ha cambiado mucho desde su fundación en cuanto a las actividades que desarrolla y las que necesita realizar”. Con una evaluación muy cuidadosa se determinará qué espacios deben modificarse, revisar, arreglar o remodelar.
El plan de trabajo, añadió Escalante Hernández, además está englobado por dos ejes transversales: igualdad de género y diversidad, y sostenibilidad, todo con la meta de mejorar la vida comunitaria, la docencia, la infraestructura, etcétera.
La directora recalcó que en instancias como el Laboratorio Nacional de Ciencias de la Sostenibilidad o la recientemente creada unidad del IE en Mérida se encuentra una gran oportunidad de potenciar el impacto social, tanto del Instituto como de la misma Universidad.
En una visión de mediano y largo plazo Ecología tendría esa transformación de la manera en que hace su trabajo e impacta a la sociedad, no únicamente en términos académicos sino del desarrollo, y con base en esos cambios se consolidaría su liderazgo nacional e internacional, en los campos que cultiva: ecología, evolución y sostenibilidad.