El premio Emerging Voices, para académicos de Arquitectura

El trabajo de Pavel Escobedo y Andrés Soliz, egresados y profesores de la Facultad de Arquitectura (FA), fue reconocido con el premio Emerging Voices en su edición 2020, que cada año otorga la Architectural League de Nueva York para aquellas prácticas emergentes en el ámbito de esa disciplina con potencial de influir en áreas como la arquitectura, el paisaje y el diseño urbano.

Cada año la Architectural League selecciona ocho despachos de arquitectura de Estados Unidos, Canadá y México, y esta vez la firma Escobedo Soliz, integrada por Pavel Escobedo Amaral y Andrés Soliz Paz, docentes del Taller Jorge González Reyna de la FA, resultó beneficiada.

Se trata de un reconocimiento a las prácticas emergentes de América del Norte que podrían aportar algo a la cultura arquitectónica.

Establecido en 2016, el despacho Escobedo Soliz fue fundado por ambos egresados de la FA, cuya práctica se basa en una exploración continua de materiales, estructuras y sistemas de construcción para encontrar soluciones particulares a cada situación, con proyectos construidos que van desde instalaciones de arte efímeras hasta escuelas públicas rurales. Son la segunda oficina constituida por egresados de la UNAM que obtienen este premio.

Además, Escobedo Soliz fue uno de los despachos ganadores del Programa de Jóvenes Arquitectos de MoMA PS1, cuyo trabajo fue exhibido en el Pabellón de México en la Bienal de Arquitectura de Venecia 2018, donde este 2020 –de mayo a noviembre–, estarán presentes.

Pavel Escobedo y Andrés Soliz afirmaron que no hacen arquitectura para obtener reconocimientos, sino porque es su pasión y quieren compartirla, y sumado a la docencia, lo ven como un todo al final. Este galardón es, entonces, la cereza del pastel de la labor que realizan. En ese sentido, señalaron que este premio es, quizá, debido a la contundencia y claridad de sus proyectos, aunque también les fue otorgado por la trascendencia de su actividad docente.

Como parte de esta distinción, el próximo 19 de marzo ambos viajarán a Nueva York, sede de la Architectural League, donde impartirán una conferencia.

Destacaron que su práctica dentro de la arquitectura ha sido variada. “Tenemos proyectos públicos, artísticos y museográficos, así como casas y escuelas, lo que da una perspectiva de que somos jóvenes arquitectos que se adaptan muy bien a las circunstancias, independientemente del presupuesto. Siempre hay una respuesta lógica”.

Señalaron que algo que distingue la obra de ambos es la claridad de las ideas materializadas, pero también tratan de que siempre se manifieste el espacio en esencia. “Es como una arquitectura que trata de crear experiencias esenciales con los elementos que tiene, además del cuidado en el uso de los sistemas constructivos como estructura y materiales”.

En sus propuestas hay una clara atención hacia el aprovechamiento de la luz, tratan de que cada una de sus obras tenga una aportación especial.

Docencia y práctica profesional

Expusieron que buscan que su crecimiento profesional también se vea reflejado en la docencia que desempeñan en esta casa de estudios, para que las nuevas generaciones tengan aportaciones personales en ambas áreas, es decir que los arquitectos que están construyendo obras impartan docencia, lo que contribuiría a la producción de muy buena arquitectura en la UNAM.

Por otra parte, el que este premio lo hayan recibido destacados arquitectos de Norteamérica, “nos motiva a seguir, a hacer las cosas bien y a no olvidar hacia dónde vamos y dónde queremos ir; mantener siempre esa línea y ser fieles a nuestros principios”.

Por último, puntualizaron que el galardón “es una consecuencia de nuestro trabajo y nos ayuda a ver lo que estamos haciendo, qué está bien, los errores cometidos y qué se puede solucionar”.