En nuestras manos, resolver crisis ambiental: Carabias

El planeta enfrenta diversas crisis –energéticas, ambientales, económicas y sociales– derivadas de los modelos de desarrollo, basados en la extracción intensiva de recursos, la degradación de los sistemas biofísicos y su distribución desigual entre la humanidad, afirmó la académica de la Facultad de Ciencias de la UNAM, Julia Carabias Lillo.

“Si estas crisis las hemos generado los humanos, también está en nuestras manos resolverlas”, añadió la doctora honoris causa por esta casa de estudios, al participar en el Foro 20.20. Diseñando el futuro, enfocado a la Sustentabilidad, y organizado por Fundación UNAM.

El presidente del Consejo Directivo de Fundación UNAM, Dionisio Meade y García de León, presidió el evento y señaló que la pandemia por Covid-19 dejó múltiples lecciones y a la luz de esta nueva realidad, es necesario discutir cuál debe ser la estrategia de las políticas públicas para diseñar el futuro.

En ese sentido, apuntó, las estrategias de sustentabilidad no pueden ser consideradas como complementarias, sino parte fundamental de la visión para enfrentar el futuro. Durante el confinamiento, en diversas partes fueron vistas diversas especies deambulando por las calles, en ciudades, como si reclamaran un trato distinto y nuevas formas de relacionarnos con ellos.

Carabias Lillo también expuso que en los últimos 50 años la población se duplicó, pero la extracción de recursos y de energía se triplicó; el comercio se incrementó por 10 y la economía global creció cinco veces. Sin embargo, casi la mitad de la población vive en pobreza, 700 millones de personas padecen hambre, tres mil 200 millones están afectados por la degradación de la tierra y cada año se registran nueve millones de muertes prematuras a causa de la contaminación.

Las crisis ambientales, agregó, implican un estado de riesgo de las condiciones estables de los sistemas biofísicos planetarios que dieron origen a la vida tal y como la conocemos hoy, y cuyas causas son de origen antropogénico.

Entre las causas están: la deforestación, la contaminación, la sobreexplotación, el cambio climático, la producción de alimentos, el tráfico de especies, las descargas urbanas, los desechos sólidos, el transporte y la electricidad, así como el desarrollo urbano y la infraestructura, enumeró la ganadora de la Medalla Belisario Domínguez.

En el Auditorio Maestro Jesús Silva Herzog del posgrado de Economía indicó que para cambiar estas condiciones se requiere poner énfasis en el manejo sustentable de la biodiversidad, establecer nuevas estrategias alimentarias y energéticas, así como realizar una planeación adecuada a fin de lograr ciudades sustentables.

En el caso del manejo sustentable de la biodiversidad, implicaría impulsar la deforestación cero, fortalecer el sistema de áreas protegidas, establecer cadenas de mercado diferentes para productos verdes, dar opciones de empleo para quienes no tienen tierra, fomentar el manejo forestal sustentable, de vida silvestre y ecoturismo, entre otras acciones.

“Se ha cuantificado que si logramos al menos mantener el 37 por ciento de ecosistemas marinos y el 30 de superficie terrestre lograríamos esos equilibrios”, aseguró la experta.

En su oportunidad, el investigador del Centro de Geociencias, Luca Ferrari, expuso que también se han rebasado los límites planetarios en cuanto a los recursos energéticos y que en solamente 60 años se ha más que duplicado nuestra huella ecológica por el uso desmedido de la energía.

Debemos tomar en cuenta, subrayó, que esta civilización industrial, en la que una parte de la población vive con agua, electricidad, internet, gasolina, comida disponible todo el tiempo, se ha construido sobre estas fuentes contaminantes.

Al presentar su ponencia Crisis energética, ecológica y social: tiempo de repensar el concepto de desarrollo sostenible aseveró que el 80 por ciento de la energía que se consume en el planeta es de combustibles fósiles.

En el Foro moderado por la coordinadora del Consejo Académico del Área de las Ciencias Sociales, Leticia Cano Soriano, el experto comentó que la crisis energética se vincula a la social y una muestra de ello es que el 10 por ciento de la población más rica del mundo es responsable de casi el 50 por ciento de las emisiones de gases de efecto invernadero, e históricamente los 23 países más ricos han emitido lo mismo que los 150 restantes.

Finalmente, expuso que un futuro sustentable necesita tomar en cuenta los límites biofísicos del planeta, disminuir el sobreconsumo de energía, principalmente de los países y sectores más ricos, consumir lo que se produce localmente, fomentar la agricultura no dependiente de los combustibles fósiles, producir mayores bienes duraderos y que éstos se puedan reciclar.

En tanto, Diego Rafael Pérez Salicrup, director del Instituto de Investigaciones en Ecosistemas y Sustentabilidad, presentó la conferencia El manejo adecuado de los socioecosistemas como una condición ineludible para la sustentabilidad en la cual explicó parte de sus estudios de la ecología del fuego, relacionados con la migración de las mariposas monarcas, desde Estados Unidos y Canadá, hacia bosques de la parte central de nuestro país, de la Reserva de la Biósfera Mariposa Monarca.

Se realizó el Foro 20.20, organizado por Fundación UNAM. Foto: Víctor Hugo Sánchez.
También podría gustarte