Festival por el amor auténtico
Las celebraciones del Día de San Valentín se vieron modificadas en diferentes latitudes del mundo, en particular en China, donde surgió la enfermedad por coronavirus (Covid-19). En el resto del globo la amenaza de dicha epidemia es latente, y México no escaparía a un posible escenario de ese tipo.
Alumnos de las facultades de Derecho, Psicología, Arquitectura y de Estudios Superiores Aragón, que acudieron al Festival AmorEs, indicaron que no habría necesidad de vulnerar la salud de los otros sólo por hacerles ver que los amamos. “Por supuesto que sí usaría el tapaboca, aunque cuando sabes que el cariño existe no es indispensable demostrarlo tanto”, opinaron Yoko Daniela Camacho Reyes y Eduardo Salazar, futuros arquitectos.
En Las Islas de Ciudad Universitaria, Paloma Gómez y Luis Fernando González esperaban su turno para casarse; mientras tanto, resaltaron la necesidad de proteger las vías respiratorias para no contagiar de coronavirus a los seres que más quieren y a los de su entorno. “Independientemente de que haya cariño y amor entre nosotros, primero está la salud, y hasta que estemos bien, que el virus ya no nos afecte, entonces sí volveríamos a besarnos”.
A propósito del día de San Valentín, hubo diálogos, acciones de salud, charlas, música y diversas actividades culturales en 35 carpas y el foro móvil Prometeo de la Dirección General de Divulgación de la Ciencia.
La jornada organizada por Atención a la Comunidad, en colaboración con Prevención, Atención y Seguridad Universitaria, la Oficina de la Abogacía General de la UNAM y el Instituto de las Mujeres de Ciudad de México, puso el acento en la sensibilización hacia la edificación de relaciones humanas en un ambiente de paz, respeto, equidad, autocuidado, solidaridad y, sobre todo, de no violencia.
En una de las carpas se exhibió el latex más costoso del orbe, aquel que no se coloca previo a la relación sexual; se trata del preservativo que por no utilizarse generaría gastos hasta por un millón 718 mil pesos que se invertirían en los primeros 12 años de vida de un hijo, incluyendo desde los cuidados médicos preparto, hasta su escolarización y gastos generales.
Se habló también de la higiene íntima. No sólo de aquella referida a la dermis, sino a la empatía y el pensamiento positivo y constructivo en una relación de pareja, así como de planeación familiar, de los derechos sexuales y reproductivos en México, equidad de género y del desprincesamiento.
El foro fue inaugurado por la abogada general, Mónica González Contró; Mireya Ímaz, directora general de Atención a la Comunidad; Germán Álvarez Díaz de León, titular de la Dirección General de Orientación y Atención Educativa, e Ingrid Aurora Gómez, de la Secretaría de las Mujeres de Ciudad de México.
Desmitificar lo romántico
En el acto protocolario, González Contró señaló que este festival se da en un día simbólico para los jóvenes. Es una actividad que pretende desmitificar el amor romántico que tan nocivo ha sido para la sociedad, que provoca la discriminación hacia las mujeres, las coloca en una situación de vulnerabilidad y permite que se siga dando esta violencia y normalizando los estereotipos de la debilidad de las mujeres.
Mireya Ímaz indicó que el amor romántico está cambiando, “sin damas ni princesas que necesiten ser rescatadas porque ahora dirigen laboratorios, comandan equipos de futbol americano o misiones espaciales, y sin príncipes ni caballeros que todo lo pueden, menos llorar”.
Ingrid Aurora Gómez felicitó a la UNAM por las reformas a la legislación universitaria, “donde se ha normado como falta grave la violencia de género. Este es un triunfo de las estudiantes, evidentemente de las académicas que han estado acompañando los procesos y, por supuesto, de las trabajadoras, pero también es un triunfo de la sociedad y de Ciudad de México”.
En la ENEO
En tanto, la Escuela Nacional de Enfermería y Obstetricia (ENEO) desarrolló la Jornada Académica y Artística por el 14 de febrero, que incluyó la exposición fotográfica Moradas y rostros de dos pueblos, una intervención poética, concurso de baile, además de una carpa para difundir entre la comunidad temas relacionados con la salud reproductiva, y el módulo Me quiero, me cuido, donde se hizo una evaluación de la composición corporal y se dieron recomendaciones generales de ejercitación para la salud.