Gaceta histórica: La Escuela Nacional de Medicina se transforma en Facultad de Medicina

El pasado 21 de abril, en reunión del H. Consejo Universitario, fue aprobado el acuerdo que convierte a la Escuela Nacional de Medicina de nuestra Institución en Facultad.

No hace mucho, el Consejo Universitario acordó la misma transformación para el plantel de Ingeniería, con lo que la UNAM cuenta en la actualidad con cinco Facultades: Filosofía y Letras, Ciencias, Derecho, Ingeniería, Medicina.

La Escuela Nacional de Medicina había creado una División del Doctorado, que perseguía fundamentalmente el objetivo de formar especialistas e investigadores en las diversas ramificaciones de la ciencia médica. Como se sabe muy bien, estos especialistas e investigadores desempeñan funciones básicas en todo lo que toca al adiestramiento de profesores universitarios, la promoción del estudio en los sectores que lo requieran, la formulación de textos científicos y la divulgación de los conocimientos médicos en general.

La Facultad de Medicina impartirá entonces cursos destinados a orientar en este nuevo sentido la docencia médica y afrontará, junto a las anteriores, otras tareas de importancia nacional.

La ciencia médica, la actividad material de sus representantes, cumplen de por sí una labor imprescindible y constante, puesto que se relacionan inmediatamente con el problema de la conservación de la vida humana. Pero esta función diaria, ininterrumpida, no resume con ser tan grande e indispensable toda la función de la ciencia médica y sus instrumentos técnicos.

Armados de un bagaje tradicional, de una experiencia y un conocimiento asimilados por muchas generaciones, los médicos deben atender con esa militancia cotidiana los cuantiosos casos de salud o existencia amenazadas. Pero ese ejercicio no basta e, incluso, impide a veces que el médico o el cirujano dispongan del tiempo suficiente para la experimentación y el estudio detenidos de aspectos científicos cuya atención no exige el trabajo de emergencia.

Ese trabajo de preparación, de laboratorio, de previsión científica, tiene que ser cubierto por equipos coherentes de especialistas, técnicos e investigadores de la medicina, que se transforman así en poderosos auxiliares de esa agotadora labor de atención médica cotidiana.

En la misma sesión del Consejo Universitario se aprobaron un nuevo reglamento para la Facultad de Medicina, así como algunas reformas a los planes de estudio de la Facultad de Derecho y la carrera de Odontología.

El doctor Nabor Carrillo, Rector de la UNAM, y el doctor Efrén C. del Pozo, Secretario General de la misma,  presidieron la reunión.

Consulta la edición del lunes 2 de mayo de 1960: