Género, asignatura obligatoria en Trabajo Social

Se agregaron además otras materias con contenidos vinculados a dicho tema

Foto: Juan Antonio López.

Para comprender la relevancia de la perspectiva de género a partir de su sustento, que es la teoría feminista, el estudio de la realidad social contemporánea la considera como uno de los ejes centrales como categoría de análisis.

Por ello, la Escuela Nacional de Trabajo Social (ENTS) incorporó a la modalidad presencial de la carrera impartida en dicha entidad la asignatura obligatoria de Género, que se cursará en el primer semestre de la licenciatura.

Tras una reforma curricular con trabajo de análisis académico, reuniones colegiadas y de claustros por casi una década, con la participación del alumnado y profesorado, así como de egresadas y egresados, se añadieron además otras materias con contenidos vinculados a dicho tema: Género y Violencias, Familias Diversas, Procuración y Administración de Justicia y Derechos Humanos, informó Leticia Cano, directora de la ENTS.

Asimismo, comprende asignaturas como Necesidades y Problemas Sociales, Protección Social a las Familias, Violencias e Inseguridad Pública, Diversidades e Identidad de Género, Mediación en Trabajo Social y Estrategias de Intervención en Violencia.

“Esta reforma es resultado del rigor académico y de la incorporación de una demanda estudiantil respecto a los temas de género, derechos humanos, familias diversas y sustentabilidad. Es una demanda atendida y con pertinencia”, subrayó Leticia Cano.

Dicha modificación curricular, que se constituirá en el plan de estudios de la Licenciatura en Trabajo Social 2019, se pondrá en marcha en agosto del presente año a partir del próximo semestre (2021-1).

“Tendremos en operación dos planes de estudio de manera simultánea, el de 1996, que será cursado por el alumnado de tercero, quinto, séptimo y noveno semestres, y cuando termine la última generación de estudiantes del plan 1996 habrá de concluir dicho plan.”

En estos años, expuso la directora de la ENTS, el contexto social ha cambiado, “por lo que los planes y programas de estudio, sobre todo de una profesión tan sensible como la nuestra, tenían que modificarse en razón de lo que hoy nos exige y demanda nuestra sociedad”.

Mapa curricular

La materia de Género no es la única con este perfil. El plan de estudios modificado integra un total de 49 asignaturas, de las que 42 son obligatorias y siete optativas.

“Ahora se nos pide una formación básica que va del primero al tercer semestre, por eso Género se ubica en el primero del plan de estudios modificado; del cuarto al sexto es una formación intermedia; y del séptimo al noveno semestres, la profundización.”

A partir del séptimo hay cuatro líneas temáticas de profundización: salud y medio ambiente, violencias y género, desarrollo social y humano, y grupos de atención prioritaria, explicó Cano Soriano. “Hemos tenido cuatro planes de estudio: 1969, 1976, 1996 reestructurado en 2003 y ahora el plan 2019, el cual resulta pertinente y necesario por la complejidad del contexto social que hoy vivimos”.

En la Facultad de Química

La incorporación de asignaturas con perspectiva de género es uno de los cinco ejes contra la violencia de género anunciados por el rector Enrique Graue a comienzos de febrero.

Con alrededor de 90 alumnos, la Facultad de Química arrancó ya una asignatura de Introducción a los Estudios de Género, que cubre este tema desde distintos ámbitos, como roles y estereotipos, división sexual del trabajo, tipos y modalidades de la violencia, protocolos de atención a las víctimas o ciencia y género.

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