Instalaciones de la UNAM

Cuando México fue elegido como sede oficial para celebrar los Juegos de 1968, desde ese momento se formó un Comité Organizador para preparar la logística requerida y construir o acondicionar las instalaciones necesarias que deberían albergar los deportes que integran el programa olímpico.

Para eso fueron elegidos los especialistas necesarios, que realizarían un diagnóstico sobre las instalaciones necesarias, existentes o de nueva creación.

Entre ellos estuvo el arquitecto Pedro Ramírez Vázquez, quien propuso el estadio de la UNAM para albergar las ceremonias de inauguración y clausura, las competencias de atletismo y las pruebas de salto con las cuales se culmina tradicionalmente el programa de equitación en los Juegos Olímpicos.

La Alberca de Ciudad Universitaria recibió a todos los equipos participantes en las eliminatorias del waterpolo, motivo por el cual adquirió su status olímpico como subsede.

El Waterpolo, programado del 14 al 25 de octubre, contó con 16 selecciones, integradas en dos grupos, de ocho equipos cada uno, bajo el sistema de competencia de todos contra todos.

Los dos mejores de cada grupo se enfrentarían cruzados para buscar su pase a la final entre los cuatro semifinalistas. Los ganadores en semifinales se enfrentarían por las medallas de oro y plata, mientras los perdedores jugarían por la presea de bronce.

Junto con el Estadio y la Alberca de la UNAM también fue utilizado el Frontón Cerrado de Ciudad Universitaria, para prácticas de entrenamientos en basquetbol y voleibol, que por cuestiones de logística resultaba más fácil llegar y entrenar en C.U., que trasladarse al Gimnasio Olímpico “Juan de la Barrera” o hasta el Palacio de los Deportes.

Para utilizar el Estadio Olímpico Universitario fue necesario hacer algunas adecuaciones y cumplir con requerimientos técnicos además de otros requisitos que pedían el COI y el COO, tanto en los espacios internos como en los externos, pero siempre con el respeto la estructura básica que tenía desde su inauguración, en 1952, así que, entre las obras realizadas, se hicieron:

• La remodelación del Palco Presidencial, ubicado en el palomar.
• El acondicionamiento en el Palco para los huéspedes distinguidos.
• La adaptación de nuevas áreas para Prensa y Televisión, en el Palomar.
• La creación de bodegas para guardar el equipo y materiales para las competencias.
• Se cambió y se instaló un nuevo y moderno tablero electrónico.
• En las tribunas se reemplazaron los asientos individuales, por asientos corridos para garantizar el cupo de 80 mil espectadores, cómodamente sentados.¡
• Se reacondicionó el Reposo de Atletas, con casilleros y baños para los deportistas y se incluyó otra área para la concentración de los atletas, previo a las competencias.
• Se adaptó un elevador, para comunicar el Palco presidencial con la zona de premiación (en la parte baja del estadio).
• Se adecuaron también los palcos, para los invitados especiales a las competencias.
• Se excavó un foso, que circundara la cancha del estadio, como zona de seguridad.
• Se cambió el césped del campo y el sistema de drenaje, en toda la cancha.
• Se instaló una pista de tartán, con novedosos materiales sintéticos y se amplió la pista reglamentaria con ocho carriles olímpicos (antes contaba sólo con siete carriles).
• Se acondicionaron las oficinas generales para los jueces, con cafetería, baños y restaurante, anexadas al costado sur del estadio.
• Y se instaló una clínica médica, para atención del público asistente a las competencias, en la cabecera sur del estadio, junto al Reposo de Atletas.