La Facultad de Ciencias Políticas y Sociales cumplió sus primeros 70 años de existencia y de ser un referente nacional, regional e internacional, tanto en el estudio sistemático de las ciencias sociales como en la tradición del pensamiento crítico en diferentes latitudes.
Al presidir la ceremonia conmemorativa a distancia, el rector Enrique Graue Wiechers destacó que han sido siete décadas de logros y de incansable labor científica, académica y social.
“Desde 1951 hasta la actualidad —pasando por 1968, año en que adquirió el estatus de Facultad— se ha distinguido por atender la necesidad estratégica de contar con egresadas y egresados que formen parte del Servicio Exterior Mexicano, de los medios de comunicación, de los profesionales de la administración pública que sean agentes claves en la planeación y evaluación de procesos y políticas, donde la sociología, la antropología y la ciencia política contribuyen al cambio social.”
Graue también rememoró que la Facultad fue refugio y origen del pensamiento crítico latinoamericano, a través del Centro de Estudios Latinoamericanos, donde convergieron las voces y el pensamiento de grandes figuras políticas e intelectuales exiliadas, perseguidas por las dictaduras totalitarias de distintos países de la región.
“Es una Facultad vibrante y vital, que se ha organizado en torno a sus distintas disciplinas en centros de estudio, seminarios y observatorios, para tener el pulso social y político de nuestra nación, aportando conocimientos y propuestas con responsabilidad social”, expresó el rector acompañado por la presidenta en turno de la Junta de Gobierno, Ana Rosa Barahona Echeverría; del secretario general de la Universidad, Leonardo Lomelí Vanegas; de la coordinadora de Humanidades, Guadalupe Valencia García, así como de la directora de la FCPyS, Carola García Calderón.
Entre sus exdirectores hay figuras destacadas en la historia institucional y nacional, Enrique González Pedrero, Pablo González Casanova y Víctor Flores Olea, entre otros.
Enrique González Pedrero, doctor honoris causa por la UNAM, celebró los 70 años de existencia de la Facultad, de la cual fue docente por cinco décadas: “Son muchos los recuerdos y alegrías que evoco al pensar en mi querida escuela que, en mi gestión como director, transitó de Escuela Nacional a Facultad, y que forman parte de mi existencia. Felicidades y muchos años más a mi querida Facultad”.
Impulso a la democracia
Gina Zabludovsky Kuper, miembro de la Junta de Gobierno, recordó que la FCPyS ha tenido múltiples aportaciones al estudio de las ciencias sociales y citó tres aspectos:
La libertad de expresión, pues hacia los años 70 era prácticamente inexistente, y en 1976, en lo que se conoció como el golpe a Excélsior, académicos de esta entidad participaron como promotores, fundadores, escritores y escritoras de nuevos periódicos y revistas, muchos de ellos todavía existentes.
El trabajo respecto a la ciudadanización de los órganos electorales. Varios profesores participaron como representantes de los partidos opositores para vigilar las elecciones de 1988 y tras la “caída del sistema” colaboraron en la creación de los primeros órganos autónomos y ciudadanos, como consejeros y consejeras ciudadanas; uno de ellos fue presidente del Instituto Federal Electoral, hoy Instituto Nacional Electoral (INE).
“El papel de la Facultad en la democracia en México ha venido de importantes iniciativas institucionales, como el Programa Voto Informado; el monitoreo y análisis de los contenidos de las campañas y precampañas, que el INE ha confiado a nuestra entidad, y la Cátedra Extraordinaria Francisco I. Madero que promueve el debate de calidad y los temas de la democracia y los derechos humanos”, resaltó.
Javier Garciadiego Dantán, también miembro de la Junta de Gobierno externó que la FCPyS es una instancia plenamente viva, con muchos retos y problemas, pero con más capacidades y potencialidades. Los egresados tienen nuevos desafíos y sobradas capacidades.
Acentuó que dos egresados, José Woldenberg y Jacqueline Peschard, dirigieron dos instituciones fundamentales para la democratización de la nación.
El también investigador de El Colegio de México señaló que esta Facultad, una de las más importantes de la UNAM, debe tener mayor presencia y protagonismo en los órganos políticos y sociales del país, y contribuir a mejorar la cultura política de los mexicanos, lo cual exige incrementar su presencia en los medios.
Pluralidad y libertad de pensamiento
El profesor emérito Octavio Rodríguez Araujo aseveró que a esta entidad universitaria la caracteriza la pluralidad de pensamiento, como a la UNAM en su conjunto. La pluralidad y la irrestricta libertad de pensamiento favorecieron el desarrollo de las ciencias sociales convirtiéndola en un referente en México y en América Latina.
Dijo que en las décadas de 1960 y 1970 se sentaron las bases para su proyección internacional, tanto los cursos de verano como los de invierno, organizados por González Casanova, González Pedrero y Flores Olea, y que reunieron a los intelectuales más connotados de Europa y de América Latina.
Con la creación del posgrado en 1968, la antigua Escuela Nacional de Ciencias Políticas dio el salto cualitativo a la Facultad que hoy conocemos. Los estudios de posgrado propiciaron mayor énfasis en investigación, y no pocas de las tesis de grado que se han producido son ahora libros de gran valor.
Al dar la bienvenida, la directora Carola García Calderón, indicó que desde sus inicios ha sido un proyecto comprometido con la formación científica, crítica, plural del quehacer intelectual.
“Ciencias Políticas ha sido y es una casa de ideas, de pensamiento crítico, de la inspiración liberal, del marxismo y de muchas corrientes de pensamiento que conforman todo un mapa en la producción académica de las ciencias sociales”, subrayó.
Memoró que de 1930 a 1950 surgieron las escuelas de ciencias políticas y sociales por la necesidad de contar con la teoría y el estudio de las ideas políticas, en un mundo que tras la Segunda Guerra Mundial se reconfiguraba física y geopolíticamente. En ese escenario nació esta entidad con una matrícula de 142 estudiantes y ahora suma 12 mil en los sistemas escolarizado, abierto y a distancia: más de 50 por ciento son mujeres.
También apuntó que la Facultad ha acompañado, en diferentes momentos, la construcción de nuevas instituciones, los avances de la vida democrática, el impulso de cambios y está en la búsqueda de una sociedad más igualitaria, libre y transparente.
Hizo un reconocimiento a uno de sus académicos destacados: el exrector Pablo González Casanova por sus estudios sobre la democracia en México, al tiempo que llamó a la comunidad a continuar contribuyendo al desarrollo de las ciencias sociales.