Hay un cambio estratégico en la campaña de Donald Trump. Por primera vez el expresidente y su base se encuentran a la defensiva en el terreno mediático, comentó Juan Carlos Barrón, investigador del Centro de Investigaciones sobre América del Norte (CISAN) de la UNAM.
Durante la presentación de la ponencia Estrategias electorales en medios digitales, Barrón Pastor explicó que esta nueva dinámica podría indicar un ajuste significativo en la táctica de comunicación del Partido Republicano. Explicó que un ejemplo destacado es la reciente referencia de Trump a Kamala Harris como una “mujer negra”, un término que no utilizaba antes en su retórica. “Este tipo de ataque, ha sido hábilmente neutralizado por los demócratas, quienes respondieron que ‘Kamala Harris ha sido una mujer negra por más tiempo del que Trump ha sido republicano’”.
En el marco del Coloquio El resurgimiento del Partido Demócrata frente al trumpismo, organizado por el CISAN, el también doctor en Filosofía del Desarrollo Internacional, dijo que este tipo de respuesta ha colocado a Trump en una posición de vulnerabilidad inusual, dado que tradicionalmente es él quien dicta el ritmo y obliga a sus oponentes a reaccionar.
El también maestro de Investigación en Estudios del Desarrollo explicó que la campaña demócrata ha avanzado en la construcción de una narrativa que resalta la importancia de la familia y la comunidad, desafiando así el discurso “individualista y egocéntrico” que caracteriza a su oponente.
“Eso se ha logrado a partir de una estrategia mediática de la perspectiva del sistema de medios. Cómo usan el sistema de medios ambas fórmulas. Va a venir un cambio por parte de los republicanos y por lo tanto también los demócratas tendrán que adaptarse”.
El doctor Barrón refirió que durante la reciente convención demócrata, tanto Harris como su compañero de fórmula, Tim Walz, destacaron la centralidad de la familia en sus vidas y en sus discursos, y extendieron este concepto a un sentido muy amplio de comunidad y redes de apoyo que van más allá de los lazos de sangre.
El investigador afirmó que esta narrativa no sólo busca contrarrestar la retórica divisiva de Trump, sino también ofrecer una propuesta de unidad y solidaridad que atraiga a votantes indecisos.
En un ejemplo emotivo, Juan Carlos Barrón citó al hijo de Tim Walz, quien expresó su orgullo por la “liberación de que los hombres podemos ser de otra manera y no tenemos que ser conforme a la rigidez espantosa de los dos candidatos demócratas y su masculinidad retrógrada tóxica”, lo cual resalta una nueva masculinidad en la política que desafía los estereotipos tradicionales y promueve un modelo más inclusivo y respetuoso.
Con esto en mente, precisó, en el sistema de medios los demócratas han utilizado una narrativa al estilo Disney, lo cual es entendible, ya que se enfrentan a dos grandes consorcios mediáticos: Trump, respaldado por Fox News, Fox Sports y su pléyade de estrellas, contra la narrativa de Disney y ESPN. Estas plataformas se confrontan en temas como la pluralidad, la inclusión y los derechos LGBTIQ+, entre otros.
El secretario académico del CISAN aseveró que este enfrentamiento no sólo abarca la esfera política, sino que se extiende al mundo del entretenimiento y el deporte, con entidades como las ligas NFL y la NBA participando activamente en la promoción de valores de inclusión y diversidad, reflejados en sus mensajes y en la participación de sus figuras públicas.
Barrón Pastor relató que las plataformas digitales también desempeñan un papel crucial en esta batalla mediática, con grandes corporaciones tecnológicas como Facebook, Meta y Google impulsando esta narrativa desde sus sedes en California.
Por otro lado, Juan Carlos apuntó que la estrategia republicana, aunque sólida en sus bases tradicionales, enfrenta el desafío de adaptarse a una nueva realidad mediática en la que el público joven y educado, cada vez más crítico y con una fuerte presencia en redes sociales, tiene un rol decisivo. “Trump, quien antes dominaba plataformas como X, antes Twitter, y TikTok, ahora se encuentra compitiendo con la creciente influencia de figuras demócratas como Kamala Harris, cuyas apariciones en redes sociales y eventos públicos resuenan con un estilo fresco y atractivo para los votantes jóvenes”.
Enfatizó que los republicanos han intentado trasladar parte de su estrategia a plataformas como Telegram, en busca de mantener redes de contacto específicas, pero enfrentan retos considerables, incluyendo cuestiones legales y desafíos de adaptación a nuevas formas de comunicación.
Finalmente, el académico universitario indicó que el éxito de ambas campañas dependerá en gran medida de su capacidad para movilizar a votantes jóvenes e indecisos, especialmente en distritos clave y en la captación del 12-13 % de votantes inconformes con Trump o Biden. En este contexto, la brecha generacional es particularmente significativa: “mientras los votantes mayores de 65 años acuden a las urnas en un 80 %, este porcentaje disminuye notablemente entre los jóvenes de 18 a 24 años. Si los demócratas logran capitalizar esta movilización juvenil, podría definir el resultado de las elecciones”.