Páginas doradas del beisbol en la Universidad
Un momento sublime, el juego perfecto del pitcher Alejandro Ortega, alumno de Contaduría, en los Juegos Puma 2004
Una de las hazañas destacables en el beisbol auriazul fue el juego perfecto del pitcher Alejandro Ortega, entonces alumno de la Facultad de Contaduría y Administración, quien lanzó las nueve entradas sin que ningún rival llegara a primera base. Lo hizo contra la FES Acatlán en los Juegos Puma 2004.
Entre los peloteros universitarios han desfilado personajes como Heberto Castillo Martínez, Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, William Aiza, Raúl y Gilberto Borja. “Incluso Heberto Castillo Juárez (hijo de Heberto Castillo Martínez) daría a la UNAM una excelente historia como lanzador, al firmar un juego sin hit ni carrera ante los Tecos de la Universidad Autónoma de Guadalajara, en octubre de 1978”, recordó Roberto Cano Muñozcano, presidente de la asociación de beisbol auriazul en una charla a través del canal de Facebook de Deporte UNAM.
“Una hazaña sin precedente” o “Heberto Castillo de la UNAM tiró juego sin hit ni carrera” fueron los titulares de algunos medios de información que hicieron referencia a la gesta del lanzador auriazul a finales de los años 70 del siglo pasado.
La novena felina compite desde 1997 en el actual formato de la Universiada Nacional y en su primera participación consiguió el tercer lugar. Uno de sus máximos logros ha sido el campeonato del Torneo del Consejo Nacional de Escuelas e Instituciones Privadas (Conadeip) 2016, al cual acudió por invitación. Ahí venció a potencias en esta disciplina, como el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (3-2), el Tec de Monterrey campus Puebla (1-0) y el Centro de Estudios Universitarios de Monterrey (12-8).
El actual campo de beisbol se construyó en 1980, está ubicado a un costado de los de futbol, rumbo al Jardín Botánico. En 2015 se hicieron gradas para conformarlo como un parque de beisbol y que la historia de este deporte continúe escribiendo páginas doradas en la UNAM.
“Hacia 1939 se constituyó la asociación de beisbol que aglutinó a las nacientes novenas de cada Escuela o Facultad. En 1952, al inaugurarse las instalaciones de Ciudad Universitaria, la actividad deportiva se trasladó al Pedregal, el campo que estaba en el casco central del campus universitario”, rememoró Cano Muñozcano.
La conversación con el directivo, en la que también participaron Ernesto Montero y Enrique Ledón, entrenador en jefe de esta disciplina y coach asistente en el representativo auriazul, respectivamente, se efectuó como parte de la serie que Deporte UNAM transmite todos los martes a las 10 horas por su canal de Facebook con el nombre de Historias y anécdotas del deporte en la UNAM.
