Pugna Israel-Irán, con riesgo de convertirse en extrarregional
Este enfrentamiento ha dejado, hasta el 20 de junio, al menos 224 muertos en Irán, según cifras citadas por agencias; aunque la Agencia de Noticias de Activistas de Derechos Humanos eleva este dato a más de 657 fallecidos y 2 mil 37 heridos. En Israel, los misiles iraníes causaron al menos 24 decesos, además de decenas de heridos.
Moisés Garduño García, académico adscrito al Centro de Relaciones Internacionales de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, indicó que “en Medio Oriente, desde 1979, existe una pugna geopolítica entre dos modelos de desarrollo. Uno es impulsado por Estados Unidos e Israel, que responde a los intereses económicos de sus compañías transnacionales y modo de vida occidental”.
El otro, de carácter islamista, es liderado por la República Islámica de Irán y representa, en cierta medida, un proyecto cercano a la Ruta de la seda de China y la propuesta de un orden mundial multipolar.
Recordó que la pugna tuvo como pilares ideológicos el antiimperialismo estadunidense y el antisionismo israelí. Desde entonces, ha existido una contención al desarrollo de Irán mediante sanciones e inspecciones en proyectos estratégicos, en particular con operaciones clandestinas contra científicos nucleares y centros clave de desarrollo.
A partir de esa batalla, que se sostiene hasta la actualidad, se ha desarrollado una “guerra de sombras” entre Israel e Irán, precisó el académico.
“De esta manera, ambos países justifican internamente sus gastos militares mediante discursos que presentan al otro como una amenaza. En el caso de Israel existe un claro apoyo por parte de Estados Unidos, ya que desde 1981 le proporciona aproximadamente 4 mil millones de dólares anuales, de los cuales el 80 % se destina a la compra de armamento estadunidense. A la par, cuenta con armas nucleares ‘no declaradas’, amparado en una estrategia de ambigüedad u opacidad”.
Por su parte, Irán destina el 3.5 % de su PIB al desarrollo armamentista y al gasto en defensa. La mayor parte de su producción balística es de fabricación interna.
De acuerdo con Garduño García, la pugna entre Israel e Irán es un enfrentamiento que tiene como trasfondo un intento, por parte del gobierno israelí, de cambiar el régimen iraní y limitar su programa nuclear.
“En lo que va del conflicto, entre los objetivos atacados en Irán están aproximadamente 15 generales de la Guardia Revolucionaria, depósitos de petróleo y gas, incluso medios de comunicación parecen formar parte de una estrategia más amplia. Más allá de intentar suspender el programa nuclear, estas acciones podrían enmarcarse en una operación orientada al cambio de régimen en Irán”, expresó.
El enfrentamiento entre Israel e Irán tomó otro rumbo con la intervención directa de Estados Unidos. La Operación Martillo de Medianoche del sábado pasado contó con 125 aviones y 75 proyectiles con 14 bombas de más de 13 mil kilos. Las instalaciones nucleares iraníes en Fordow, Natanz e Isfahán han quedado destruidas, afirmó el Pentágono.
Moisés Garduño, académico de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS), señaló que “el ataque de Estados Unidos contra las instalaciones nucleares iraníes no sólo violó la Carta de la ONU, sino también el Protocolo Adicional a los Convenios de Ginebra, lo que puso en riesgo la seguridad de miles de personas en caso de haber provocado contaminación radioactiva”.
Subrayó que, independientemente de cómo se desarrolle el conflicto, el involucramiento de Estados Unidos representó un mal mensaje a todas las naciones, pues implica la derrota del diálogo y el poder persuasivo, para entronar el uso del poder coercitivo.
Para María Cristina Rosas, académica de la FCPyS, la crisis entre Israel e Irán ha dado un vuelco con el involucramiento directo de Estados Unidos. No parece que esta acción contribuya a un Medio Oriente más pacífico. Agregó que Irán, por ahora, experimenta un revés en su programa nuclear, pero podría buscar recuperarlo y acelerar la creación de armas nucleares que actualmente no posee.
Además, advirtió que la polarización en la región, ante el fortalecimiento de Israel, seguramente seguirá alimentando una carrera armamentista exacerbada.
Sandra Kanety Zavaleta Hernández, académica de la FCPyS, afirmó que se evidencia “cómo se rigen las relaciones de poder a nivel internacional, y de cómo los conflictos armados o una guerra siempre son útiles y generan muchas ventajas y riqueza para ciertas naciones o para algunos actores con intereses específicos”.