Recomiendan mesura ante la implantación de fluidos vaginales

El método podría ser una alternativa para el tratamiento de vaginosis bacteriana

Recientemente circuló en redes sociales información que asegura que médicos estadounidenses de la Universidad Johns Hopkins se disponen a ofrecer trasplantes de fluidos vaginales a mujeres con vaginosis bacteriana, una infección que causa incomodidades a quien la padece por el mal olor que desprende, entre otras molestias.

La afección, ocasionada por la disminución de un lactobacilo (Lactobacillus crispatus), es difícil de tratar debido a los constantes cambios en la microbiota vaginal –exacerbados por enfermedades como candidiasis y gardnerella – lo que hace que vuelva a aparecer la infección en multiples ocasiones.

De acuerdo con Alejandro Sánchez Aranda, especialista en Biología de la Reproducción Humana de la Facultad de Medicina de la UNAM, este promisorio método podría ofrecer alternativas a un sinnúmero de pacientes; sin embargo, con base en la información proporcionada en un artículo publicado en 2019, el tratamiento aún se encuentra en fase experimental y requiere de estudios más amplios con muestras más representativas y, sobre todo, con controles más confiables.

Este procedimiento es similar al trasplante de microbiota fecal el cual consiste en la obtención de microorganismos intestinales de las heces de un individuo sano (donante), para introducirlos en el tracto gastrointestinal de una persona (receptor) con infección recurrente por C. difficile con el objetivo de restaurar la microbiota intestinal dañada, teniendo excelente resultados.

Uno de los controles determinantes recaería en identificar a las donadoras. “¿Cómo estar seguros de que no padecen o padecieron alguna infección?”, cuestionó Sánchez Aranda, también experto del Centro Mexicano de Fertilidad Dr. Alberto Kably. “No podemos excluir completamente los riesgos potenciales asociados con cualquier procedimiento de transferencia de microbiota, además de los riesgos de embarazo no deseados debido a la transferencia de espermas o la transferencia de patógenos no detectados en el flujo vaginal. Por otra parte, el número de pacientes de la muestra resulta poco representativo, señaló.

Desde la perspectiva del especialista, se requeriría de una muestra más grande asi como un seguimiento a corto y largo plazos para poder individualizar los casos. “En ocasiones lo que necesitan estas pacientes es restablecer la microbiota para presentar mejoría de los síntomas”.

Al referirse específicamente a la transferencia de microbiota vaginal, señaló que aún no se conocen los efectos secundarios del procedimiento, especificamente en mujeres que desean embarazo o en aquellas que se embarazan después de la realización del procedimiento. “A pesar de que es muy baja la posibilidad de que un cultivo vaginal no detecte una infección, debemos estar conscientes del hecho y analizar con mucho detenimiento los resultados del trabajo realizado”.

De ahí que se tenga que poner atención a ciertas infecciones no habituales que las donadoras puedan tener, las cuales hay que detectar de manera oportuna debido a que en muchas ocasiones no presentan síntomas como VIH ó Hepatitis B.

En opinión del Sánchez Aranda, este tipo de tratamientos pueden ser prometedoras para un futuro. “Millones de microorganismos habitan el cuerpo humano e influyen en su desarrollo, así como en su fisiología, inmunidad y nutrición. La composición y los efectos de la microbiota humana confieren un beneficio sobre la salud del huésped”.

“Antes de hablar de este tratamiento innovador debemos de iniciar con cosas básicas, debemos saber que un cambio en el medio ambiente vaginal, pH o el balance hormonal en el huésped, puede ocasionar sobrecrecimiento de las levaduras (cándida) resultando en ardor, comezón y malestar. Y que el tratamiento de estas pacientes son antifúngicos y la restauración de la microbiota.”

En cuanto a otro tipo de microbiota, por ejemplo la que se encuentra en la cavidad oral donde conviven bacterias, hongos, virus y protozoarios, una de las más diversas del cuerpo humano, el experto aseguró que estudios recientes han demostrado que presenta un estado de homeostasis donde pese a que hay sustancias dañinas no se rompe el equilibrio con el sistema inmune del huésped.

La superficie de la piel, abundó, también se encuentra colonizada por flora bacteriana, fúngica y parasitaria, la cual desarrolla un importante papel en la protección y barrera cutánea. Tal función se encuentra determinada por la interrelación de la capa córnea y la capa lipídica superficial que determinan la permeabilidad entre el medio interno y el medio externo.

Finalmente, el ginecólogo consideró que la eficacia terapéutica de la transferencia de flujo vaginal en mujeres con vaginosis bacteriana intratable y recurrente debe tomarse con mesura ya que se necesitan ensayos clínicos aleatorizados controlados para poder normar conducta en un futuro.

También podría gustarte