Revisan la perspectiva de género en teatro

Las directoras Maricarmen Ruiz, Isabel Toledo, Mariana Gándara y Diana Magallón, la actriz Pilar Carre, la dramaturga Jimena Eme Vázquez, la diseñadora de escenografía, vestuario e iluminación Natalia Sedano y la historiadora del arte Didanwy Kent se reunieron en el Foro Sor Juana Inés de la Cruz para reflexionar en torno a la comprensión de las violencias de género en la escena teatral actual.

Didanwy Kent, como moderadora, decidió comenzar la mesa Pensar el Teatro Actual desde una Mirada Feminista con un ejercicio que consistió en pasar una caracola entre las participantes y el público asistente para que oyeran los sonidos que produce, con lo cual buscaba evocar una escucha sensible y atenta, necesaria también para tener una mejor comprensión de los temas que se abordan desde la escena.

Espacio de escuchas

“Creo que en este momento es urgente conectarnos y saber escuchar (…) hacer de esta noche sobre todo un espacio de escuchas antes que un foro de debate o un lugar para opinar”, afirmó Kent, una de las coordinadoras de Aula del Espectador de Teatro UNAM.

Durante el encuentro se habló de las inquietudes que han guiado los procesos creativos de artistas que actualmente están inmersas en proyectos de Cultura UNAM vinculados a temáticas feministas, como son Un beso en la frente, Straight y Proyecto mujeres.

Los temas giraron en torno a las figuras de resistencia en la escena teatral, colectividad, procesos de transición, pensamiento en términos de ideología de género y dimensión pedagógica durante el desarrollo creativo, entre otros.

Maricarmen Ruiz, quien es directora y actriz de Proyecto mujeres, un trabajo colectivo de trece creadoras de la escena, comentó que la colaboración al momento de montar la obra se dio de manera natural. “Nosotras llegamos sin un texto, sin nada, era la naturaleza del proyecto. Llegamos con unas preguntas y con la idea de abrir esas interrogantes a todas, no llegamos a imponer una idea”, apuntó.

En tanto, Pilar Carre, quien actúa en Straight, dijo que para poder generar un diálogo abierto a pensar en términos de género con los interlocutores es necesario que desde su interior los creadores y actores rompan con ciertos paradigmas mediante la reflexión.

Jimena Eme Vázquez, quien adaptó la obra Un beso en la frente basada en un texto de Esther B. del Brío González, aseveró que la dimensión pedagógica en su propuesta fue hacer que la hija de la protagonista invirtiera los roles y también tuviera un análisis en torno a la violencia padecida por su madre.

“La herramienta que usa lo pedagógico es subir el personaje de la hija, eso no lo tenía Esther. Entonces, lo que hice fue subirle el volumen y hacer que la hija también fuera la que tiene toda la reflexión que le ayuda a su mamá a salir adelante”, señaló.