Firman convenio la UNAM y la Universidad Clark
Firman convenio para elaborar Atlas de impactos del cambio climático, un modelo de sistemas dinámicos del balance del agua para saber qué esperar en esta materia en el tema hídrico.
William Lee Alardín, titular de la Coordinación de Investigación Científica (CIC), agradeció la oportunidad de establecer este convenio entre ambas instituciones educativas, en el que especialmente se trabajará con el Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático (ICAyCC) y el Instituto de Ecología (IE), entidades que desde hace tiempo impulsan diversos proyectos de investigación en este tema.
“Contamos con institutos, centros y programas enfocados a este problema, especialmente el Programa de Investigación en Cambio Climático (PINCC) que vincula a múltiples escuelas con proyectos relacionados con este tema, pero contamos con programas dedicados a suelos, salud, espacio, epidemiología, enfermedades emergentes y nutrición. Cada uno con experiencias que aportarán importantes cosas a este particular proyecto”, comentó.
Durante el encuentro, realizado en la Sala de Consejo Técnico de la CIC, Sebastián Royo, vicerrector de la Universidad Clark, recordó que su relación con México tiene ya varios años y se mostró emocionado por la oportunidad de trabajar con la UNAM en investigación, educación y aprendizaje social en temas de recursos hídricos y los impactos relacionados con la alimentación, la salud y los medios de vida en la megalópolis del Valle de México.
“Hemos tenido la oportunidad de trabajar con Timothty Downs y Marisa Mazari, impulsores de este proyecto, y ha sido excepcional ver no sólo su pasión, sino el extraordinario compromiso con este tema y sabemos que harán una diferencia, sobre todo porque podemos tender nuevos puentes de colaboración con la Universidad Nacional en un tema tan crucial para la humanidad”, expresó.
“Vamos a investigar los impactos del cambio climático sobre el agua que es como una puerta de entrada para investigar todas las demás consecuencias sobre la salud, la agricultura, las especies, los ecosistemas. Tenemos el compromiso fuerte de cocrear con las comunidades de la región, pues no se trata solamente de investigación, sino de educación”, detalló el investigador.
Esto fue reforzado por Marisa Mazari Hiriart, corresponsable del proyecto por la UNAM, quien agregó que el proyecto es un complemento del trabajo que inició hace tiempo con Francisco Estrada Porrúa, actual director del PINCC, pues afecta no sólo a Ciudad de México, sino a las urbes alrededor, y el tema del agua es muy preocupante.
“Es una oportunidad para interactuar no sólo con universitarios de la UNAM o de la Universidad Autónoma del Estado de México, sino con grupos que están metidos en estos asuntos. Es un tema de frontera, necesidad y urgencia. El grupo de Francisco está más metido en modelos dinámicos atmosféricos y nos invitaron a aportar con la parte hídrica, también estamos viendo la carencia de información que tenemos para responder ante esta emergencia”, reflexionó al respecto, la directora del Instituto de Ecología, Ana Elena Escalante Hernández. Asimismo destacó que la entidad a su cargo agradece ser parte de este proyecto debido a que se tiene más de una década que el Instituto ha puesto en marcha toda una serie de estrategias que incluyen un programa de sustentabilidad y el Laboratorio Nacional de Ciencias de la Sostenibilidad para impulsar este tipo de ideas.
“Tratamos de impulsar estas ideas, algo que es sumamente complicado, sobre todo la de unir estas disciplinas e ir más allá de la academia. Gracias por apoyar este proyecto en colaboración con la UNAM, y esperamos que los resultados sean sorprendentes”, subrayó.
Los temas a tocar en este convenio permiten múltiples oportunidades de colaboración con el Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático, enfatizó su director, Jorge Zavala Hidalgo, pues desde hace muchos años esta entidad ha realizado esfuerzos multidisciplinarios y transdisciplinarios como el PINCC, o Programa Universitario de Estaciones Atmosféricas que lleva el tema al bachillerato y desde el año pasado se ha tratado de desarrollar sensores de bajo costo con la idea de educar.
“El problema del agua es muy importante en México, especialmente en el Centro, que tiene la perspectiva de ser cada vez más complicada. Los esfuerzos que se están haciendo son insuficientes y todo lo que se sume contribuye muchísimo en ese aspecto”, indicó.
El proyecto tiene cuatro principales líneas de acción: la primera, elaborar un Atlas de impactos del cambio climático con plataformas de sistemas de información geográfica, que esté disponible vía web; segundo, desarrollar un modelo de sistemas dinámicos del balance del agua para saber qué esperar en esta materia en el tema hídrico, no sólo actual sino a futuro.
En tercer lugar, se espera facilitar la toma de decisiones mediante un sistema de realidad extendida que simule los posibles futuros bajo diferentes escenarios de cambio climático, ya sea respecto al nivel del agua que sea una herramienta no sólo para los tomadores de decisiones, sino aquellos que se verán directamente impactados por el problema; finalmente, se espera apoyar en educación pública, no sólo a nivel universitario, pues se espera trabajar con jóvenes desde el bachillerato.