Superación personal y medallas, objetivos que deben ir a la par

El deporte de la UNAM no sólo forma atletas de éxito, sino que también inculca en los alumnos una cultura física para el resto de sus vidas. Por ello, Carlos Vázquez Villegas, psicólogo de la Dirección General del Deporte Universitario (DGDU), recalcó que una medalla o un trofeo puede ser lo más deseado por los jóvenes, e incluso el dínamo que catapulte su carrera atlética, mas no debe ser concebido como el único motivante, máxime en tiempos de confinamiento, porque en el deporte también está la semilla del crecimiento como una persona integra.

“Es importante diseñar programas donde no sólo estemos enfocados al resultado, sino además al crecimiento y desarrollo individual”, destacó Vázquez durante una charla por Facebook Deporte UNAM.

“La motivación debe estar relacionada con los deseos propios del sujeto, con su propio compromiso. Entrena porque le gusta hacerlo, es decir, con la motivación intrínseca. También hay otro tipo de motivación: la extrínseca, que es todo aquello que está fuera de la realización del deporte. Ambas deben estar presentes”, abundó el especialista.

Carlos Vázquez consideró que la motivación intrínseca es “el disfrute personal, el logro íntimo, la satisfacción individual o simplemente experimentar sensaciones positivas”, mientras que la extrínseca es “todo aquello que no es personal, todo lo que viene de afuera, ya sea una medalla, becas económicas, ropa distintiva o incentivos monetarios”.

Con el confinamiento algunos atletas universitarios perdieron la motivación, en gran medida por las restricciones que se implementaron y, con éstas, la pausa de las actividades deportivas que antes hacían con frecuencia. Ante esto, “el deporte a nivel competitivo debería estar compensado por una cuestión intrínseca”, subrayó.

Y es que, en la experiencia del psicólogo, tras la cancelación de diferentes competencias presenciales con la irrupción de la pandemia, algunos jóvenes llegaron a pensar que no había razón para prepararse. Incluso hubo quienes consideraron hacer a un lado el deporte y otros simplemente descuidaron sus entrenamientos.

“Unos dejaron de practicarlo, otros subieron de peso, dejaron de hacer ejercicio. Entonces, podemos entender que estamos pedagógicamente enseñando a que estos atletas se muevan sólo por factores externos y no tanto por factores internos”, dijo Carlos Vázquez, quien añadió que es fundamental continuar alimentando la motivación.

“Ésta no es una fuente inagotable de energía, también se agota y tiene que ser recargada”, afirmó. Para lograr una mejora en esta parte anímica de los deportistas, Vázquez Villegas refirió que es esencial “alentar, insistir, seguir adelante, incluso a través del error, del fallo, siempre intentarlo, ya que muchas veces no se empatiza con ellos ni se entiende que son seres humanos y que también tienen sus malos momentos”.