Triunfa equipo de la Facultad de Derecho en competencia de la SCJN

La tercera edición de “El camino a la Suprema Corte” estuvo enfocada en litigio constitucional y derechos humanos

Rebeca Bautista, Yazmín Domínguez, Adriana Suárez y Luis Armando Aguilar. Foto: cortesía FD.
Cuatro alumnos y una egresada de la Facultad de Derecho de la UNAM respondieron al llamado e iniciaron “El camino a la Suprema Corte” con un triunfo, al conseguir el primer lugar en la competencia universitaria de litigio constitucional y derechos humanos que desde hace tres años organiza la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), a través de la Dirección General de Derechos Humanos (DGDH).

El equipo estuvo conformado por Rebeca Bautista Martínez (séptimo semestre), Luis Armando Aguilar Vázquez y Yazmín Domínguez Rodríguez (ambos en décimo), María Fernanda Ovando (séptimo) y Adriana Suárez (asesora egresada), quienes participaron primero en una fase escrita (en la que presentaron dos posturas de un caso hipotético), y posteriormente la simulación oral de una audiencia constitucional.

Para los jóvenes pumas fue un orgullo haber representado a la Facultad de Derecho y, a la postre, conseguir el triunfo. Como explicó Rebeca Bautista Martínez, este tipo de experiencias “aportan mucho a la vida de quienes participamos en ellos. En pocas palabras, se adquieren herramientas y conocimientos, personales y académicos, que no están al alcance en cualquier espacio”; además de prepararlos de manera más integral para su vida profesional, ya que para formar parte de estos eventos la joven universitaria debió “generar la confianza para poder transmitir con convicción mis argumentos, manejando mis tiempos y la presión que la misma competencia genera”.

Es un sentimiento que compartió Luis Armando Aguilar, quien decidió unirse al equipo porque “me interesaba aprender derecho constitucional y el juicio de amparo, así como desarrollar las habilidades para la resolución de casos. Particularmente, esta competencia te da la oportunidad de acercarte a los criterios que la Suprema Corte ha emitido, que es lo que más deseaba”.

En pocas palabras, se adquieren herramientas y conocimientos, personales y académicos, que no están al alcance en cualquier espacio”

Por su parte, para Yazmín Domínguez la experiencia resultó un reto mayúsculo, ya que salió de su zona de confort y debió aventurarse “a estirar mi rendimiento académico”, además de que espera conservar a futuro “la inspiración que las personas que conocí sembraron en mí, los lazos de amistad con mis compañeros, y el haber hablado en un escenario tan imponente como la Segunda Sala de nuestro Máximo Tribunal”.

Adriana Suárez, quien asesoró a sus compañeros más jóvenes, apuntó que las competencias como la de la Suprema Corte brindan la posibilidad de “crecimiento personal y académico que te permiten este tipo de ejercicios extracurriculares. Como asesora del equipo, el mayor reto –y al mismo tiempo mi principal objetivo– fue que todos los integrantes dieran su mejor versión. Para mí se trató de la experiencia más enriquecedora en mi paso por la Facultad de Derecho”.

Cuando iba en la preparatoria “me senté en las ventanillas a leer Gaceta UNAM, en ella se encontraba un reportaje sobre un equipo de la Facultad de Derecho de la UNAM que había ganado una competencia internacional de simulación de juicios. Me generó mucha emoción haberlo leído, y ese día me prometí que cuando estuviera en la Universidad buscaría la oportunidad de participar en esos ejercicios”, recordó Suárez.

Como ganadores de la competencia, los estudiantes recibirán un lugar para realizar prácticas judiciales en la SCJN o en algún órgano jurisdiccional del Poder Judicial de la Federación, a determinación de la DGDH.

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