Urge investigación integral sobre riesgos socioambientales

Mesas redondas en el Día Internacional para la Reducción de Desastres

En temas como sismos y volcanes existe un cercano trabajo con protección civil. Foto: Cenapred.

Para abordar de una manera efectiva los problemas que causan los riesgos socioambientales, es necesario actuar con prevención y no solamente en el momento de una emergencia por sismos, inundaciones, erupciones volcánicas y desgajamiento de laderas, coincidieron expertos de la UNAM.

“El tema de los riesgos requiere de una visión y un abordaje multidisciplinarios. Hay que considerar por qué y para qué precisamos la información para la gestión de riesgos. Implica generar conocimiento de ciencia básica con la mirada puesta en las aplicaciones y masa crítica suficiente para tener un mayor impacto en las políticas públicas”, señaló William Lee Alardín, coordinador de la Investigación Científica.

Durante la primera sesión del ciclo de mesas redondas Día Internacional para la Reducción de Desastres: el Papel de la Cooperación, organizado por el Seminario Universitario de Riesgos Socioambientales (SURSA) de la UNAM, añadió que el abordaje académico de los riesgos pasa por analizar los impactos que queremos tener, los indicadores que estamos usando y por la evaluación que hace la propia comunidad de su trabajo a partir de comisiones de pares.

Naxhelli Ruiz Rivera, moderadora del evento y titular del SURSA en el Instituto de Geografía (IGg), dijo que la investigación que se realiza en la UNAM sobre riesgos socioambientales es muy heterogénea, pues se cultivan desde hace décadas las ciencias básicas y aplicadas que abordan fenómenos naturales desde la geofísica, geología, ingeniería y ciencias de la atmósfera.

También, desde la geografía física y humana se ha generado investigación muy relevante para su aplicación en el ordenamiento del territorio, la caracterización de la exposición a amenazas, los procesos de ocupación humana y resiliencia y más recientemente sobre sociología del riesgo, economía ambiental, psicología del riesgo, estudios del desarrollo y análisis de vulnerabilidad social, resumió.

Lucía Capra Pedol, directora del Centro de Geociencias, consideró que es fundamental establecer alianzas y salir de la academia para estrechar lazos con el sector gubernamental y con las comunidades locales más vulnerables. “Al final lo que hacemos resulta en productos, pero muy pocos permean en los tomadores de decisiones”, apuntó.

Rosa María Pérez Zamora, directora del Instituto de Ingeniería, mencionó que un problema importante es que la comunidad de investigadores no cuenta con un censo que nos diga qué está haciendo cada quién en cada sector.

Opinó que es esencial que la sociedad participe en la gestión de riesgos a través de delegaciones regionales, mientras que los académicos deben trabajar de una manera conjunta y no atomizada.

Francisco Estrada Porrúa, coordinador del Programa de Investigación en Cambio Climático, dijo que hay que entender los riesgos y los desastres naturales como una construcción social. Tenemos una parte física que, como en cambio climático, hay que entender de una manera disciplinaria, pero también son relevantes los procesos socioeconómicos.

Invitó a impulsar un enfoque multidisciplinario en este tema y a formar masa crítica para formar más capital humano especializado en esta materia dentro de las universidades.

Enrique Provencio Durazo, investigador del Programa Universitario de Estudios del Desarrollo, expresó que en el tema de riesgos y desastres es importante abrir la agenda hacia las humanidades, y entender que las desigualdades sociales y económicas de la población potencian el riesgo.

“Tras la pandemia necesitaremos hacer más esfuerzos para intensificar el trabajo que se viene haciendo y las políticas públicas para lograr esa interacción entre políticas de desarrollo y gestión integral de riesgos”, indicó.

José Luis Macías Vázquez, director del Instituto de Geofísica, externó que en algunos temas como sismos y volcanes existe un cercano trabajo con los órganos de protección civil, aunque criticó que hay una desvinculación en los estudios.

“La población en México ha crecido de manera desmedida y con muy poca planeación urbana y muy poco ordenamiento territorial, por lo que estos fenómenos naturales los pueden impactar de una manera más directa”, finalizó.

También podría gustarte