170 años de educación veterinaria en México y el continente americano
Debe trabajarse por la seguridad alimentaria y cuidar a las distintas especies con las que cohabitamos el planeta
El futuro de la medicina veterinaria está lleno de retos: trabajar por la seguridad alimentaria –vital para el desarrollo de un país–; cuidar la relación con las distintas especies con las que cohabitamos el planeta, y colaborar con la medicina y la epidemiología en favor de una única salud, afirmó el rector Enrique Graue Wiechers.
Al presidir la ceremonia por el 170 Aniversario de la Educación Veterinaria en México y el continente americano también canceló la estampilla postal conmemorativa, acompañado por el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Víctor Manuel Villalobos Arámbula; el titular de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia (FMVZ), Francisco Suárez Güemes; y por el director metropolitano del Servicio Postal Mexicano, Roberto Cruz Aguilera.
El Rector de la UNAM recordó que, al fundarse la primera escuela veterinaria, en 1853, el país atravesaba por un periodo aciago, pero tuvo momentos de lucidez y uno de ellos fue crear esta institución, misma que debió plasmar en un programa educativo las acciones que propiciaran el desarrollo rural de la nación.
La Antigua Escuela de Medicina Veterinaria, en la Hacienda de San Jacinto, es la antecesora de la FMVZ de la UNAM
En el evento –que también fue parte del cierre de la Jornada de Trabajo Trinacional Educación Veterinaria en Norteamérica, y contó con la participación de expertos de México, Estados Unidos y Canadá–, el Rector celebró que este sector se reúna para analizar las necesidades e inquietudes actuales.
Con él coincidió el secretario Villalobos Arámbula, quien se dijo complacido de los acuerdos a los que llegaron los expertos y aseveró que la dependencia a su cargo les dará seguimiento. Sostuvo que Norteamérica puede desempeñar un papel muy importante en la seguridad alimentaria no sólo de la región sino del mundo.
De igual forma, reconoció el aporte que han realizado al país los médicos veterinarios y zootecnistas formados en la Antigua Escuela de Medicina Veterinaria, en la Hacienda de San Jacinto, antecesora de la FMVZ de la UNAM. Asimismo, refrendó la alianza con esta Facultad para lograr que la nación alcance esa seguridad alimentaria y esté protegida de plagas y epidemias que hoy son amenazas.
La base fundamental de la sanidad radica en poder acompañar las acciones con conocimiento científico, adelantos tecnológicos, innovación y transferencia de conocimiento, añadió el funcionario federal.
El presidente de la Federación de Colegios y Asociaciones de Médicos Veterinarios Zootecnistas de México, Arturo Sánchez Mejorada, expuso que entre las conclusiones preliminares del encuentro están: fortalecer la capacitación de estos profesionales; el impulso a la calidad educativa en las escuelas y facultades de esta disciplina; la promoción de mentorías para recién egresados de licenciatura y el análisis de la migración de profesionistas mexicanos a EE. U.U. y Canadá, entre otros.
Durante la cancelación de la estampilla postal, el director de la FMVZ, Francisco Suárez Güemes, hizo un recuento histórico de la introducción de la medicina veterinaria en el país, que en sus orígenes dependió de la Secretaría de Agricultura y Fomento.
También relató cómo la Antigua Escuela de Medicina Veterinaria logró independizarse de otros tipos de estudios, además de recordar que en 1955 se trasladó a sus instalaciones en Ciudad Universitaria, y en noviembre de 1969, el Consejo Universitario le otorgó la categoría de Facultad.
En la ceremonia estuvieron: el rector de la Universidad Autónoma de Zacatecas, Rubén Ibarra Reyes, así como diversos funcionarios del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), y expertos de Estados Unidos y Canadá.