Aborda ¡Goooya! patriarcado, misoginia y micromachismos

En el Centro Cultural Universitario Tlatelolco se presentó el noveno número del periódico ¡Goooya! con el tema “¡Lo vamos a tirar! Todxs contra el patriarcado, la misoginia y los micromachismos”.

El evento inició con las palabras de John M. Ackerman, director del Programa Universitario de Estudios sobre Democracia, Justicia y Sociedad (PUEDJS), quien reconoció el esfuerzo por construir una Universidad que atienda las principales exigencias de su comunidad y agradeció a estudiantes y autoridades su presencia: “Es por ustedes que estamos aquí, el tema es esencial: el movimiento feminista es la vanguardia de la política actual, de la vida, de la economía y de la cultura para generar otra humanidad”.

Jacobo Dayán, director general del Centro Cultural Universitario Tlatelolco, dijo: “Es un honor recibirlos y albergar en este histórico Centro una lucha feminista de la cual hemos sido testigos desde 1975 en este mismo recinto cultural”.

Guadalupe Barrena, defensora de los Derechos Universitarios, destacó la importancia del periódico ¡Goooya! como un medio para la denuncia y la concientización sobre la violencia de género en la Universidad: “Cualquier medio de expresión en voz de estudiantes es un acto importantísimo. Avanzar en compartir y hablar libremente es prioridad”.

Para la publicación de este número se recibieron más de 200 colaboraciones de licenciatura y bachillerato, de alrededor de 20 entidades académicas. Está disponible en el siguiente enlace: https://puedjs.unam.mx/goooya/

Resaltando la necesidad de construir espacios seguros y libres de violencia para las mujeres, Tamara Martínez, coordinadora para la Igualdad de Género, dijo: “Reconocemos el sentipensar de los estudiantes al contarnos sus historias y compartir su creatividad; el trabajo de comunicar abre diálogos y permite conversaciones basadas en el respeto. Este periódico es una muestra de que los estudiantes producen conocimiento, nuestras armas son palabras.”

En el evento participaron más de 30 colaboradores del número. La alumna de la Preparatoria 5, Amina Reynaga, aseguró: “Es fundamental que se construyan espacios seguros y libres de violencia para las mujeres en la Universidad”.

Carolina Estefania Balcazar, del CCH Naucalpan, participó con una ilustración en la que quiso generar conciencia sobre las identidades y refirió que no deberíamos estar condicionados a cómo nos vemos para asumir un rol específico de género.

Sandra Rojas, de la FES Aragón, colaboró con el artículo “Las mártires de la cancelación”, y explicó que el problema no es con los hombres en lo individual, sino con el sistema patriarcal en su conjunto.

Compartió esta perspectiva Jaime Martínez, de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, quien habló de su experiencia como hombre: “A nosotros también nos daña el sistema patriarcal, nos imponen la violencia, nos destrozaron tanto que hasta el propio llorar nos duele”.

Con respecto a la falta de reconocimiento de los logros de las mujeres en diversos ámbitos, Ana López y Banshee Gómez, de las preparatorias 9 y 3, respectivamente, defendieron la postura de dar voz a las mujeres que no la tienen; lo que es el derecho para unos es un privilegio para otros: “¿Sólo los hombres hacen ciencia? La ciencia no ha reconocido las aportaciones de las mujeres, y aún así queremos derribar los estereotipos que se nos imponen”.

Paula Mónaco, Premio Nacional de Periodismo en 2021, emocionada compartió un sentimiento: “Tengo momentos en los que creo que las palabras ya no dicen. Soy una persona pesimista y de repente pasan cosas que me dan aire, como haber participado en este número. Que ustedes escriban nos cambia a todes”.

¿Hay alguien en esta sala que no haya sido violentada de alguna manera? ¿Tienen la fortuna de no conocer a una mujer agredida?”

Una esperanza a pesar del miedo

Para concluir, Sandra Lorenzano, del consejo asesor de ¡Goooya!, dijo que este medio es el testimonio de quienes se forman como críticos del mundo, y definió al feminismo como la esperanza en la transformación y el futuro. “El número nueve de ¡Goooya! es un símbolo de paciencia, compasión y tolerancia. ¿Cómo no estar furiosas si una de cada tres mujeres ha sufrido violencia?”, señaló.

A esta perspectiva se sumaron las palabras de Ariadna Bustamante de la Prepa 2, quien se preguntó: “¿Hay alguien en esta sala que no haya sido violentada de alguna manera? ¿Tienen la fortuna de no conocer a una mujer agredida?”

Rosa Ericka Nieves, de la Facultad de Psicología, y Mariana Peña, de la ENES Morelia, celebraron encontrar aliadas e historias comunes: “Queremos hacer ruido, lo quieran o no; florecemos y crecemos juntas”.