Extienden convenio de colaboración UNAM e IMSS
Enfrentarán el desafío de cuidar bienestar psicológico de los jóvenes
Hoy, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) enfrentan juntos el desafío de la salud mental, afirmó el rector Leonardo Lomelí Vanegas, en la firma del convenio general de colaboración y de apoyo académico y administrativo entre ambas instituciones.
Debemos celebrar este acuerdo que engloba y homologa muchas de las acciones que ya se venían realizando en condiciones claras, lo cual es un avance importante, destacó.
Refrendamos nuestra voluntad de trabajar con el IMSS, institución con la cual tenemos una relación histórica muy antigua y fructífera, y que, a través del seguro facultativo, nos permite tener a nuestros estudiantes protegidos contra una gran cantidad de riesgos de salud, señaló el Rector.
En la Torre de Rectoría expuso que había indicios de una problemática que estaba creciendo entre la población más joven, y que la pandemia exacerbó; el confinamiento que las y los jóvenes sufrieron en etapas decisivas de su formación, los marcó, y ello “nos obliga a ser más sensibles a la vulnerabilidad de este sector y tratar de atenderlo”.
La suma de esfuerzos de ambas instituciones es muy afortunada, calificó el Rector. Dentro de la Universidad hay un esfuerzo por articular y reforzar las acciones, pero tener esta vinculación con el Seguro Social para atender este problema de salud pública es de la mayor importancia para esta casa de estudios.
La UNAM y el IMSS han trabajado en otras ocasiones para lograr avances importantes para México, y en esta ocasión también lograremos buenos resultados ante este desafío que no es sólo de nuestras instituciones, sino de todo el país. “Hay que atender bien a este segmento de la población y encarar estos problemas de salud pública, que en este caso se traducen en problemas de salud mental, y estoy seguro de que juntos lo podremos hacer mucho mejor”.

En su mensaje, el director general del Instituto Mexicano del Seguro Social, Zoé Robledo, afirmó que el convenio firmado con la UNAM permitirá dar orden a los distintos puntos de interacción entre ambas instituciones, a través de un marco de actuación que abrió paso a nuevas iniciativas en temas prioritarios.
“Este convenio general puede dar orden a todos nuestros puntos distintos de contacto, de interacción entre dos grandes instituciones del Estado mexicano, como lo son la UNAM y el IMSS”, indicó el funcionario.
Explicó que uno de los ejes centrales del acuerdo fue la atención a la salud mental de las y los estudiantes universitarios, una problemática que cobró relevancia tras los efectos de la pandemia.
“Para nosotros era un poco hacernos también corresponsables, digamos, de la construcción de un nuevo modelo de atención a la salud mental de los estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma de México, pero desde luego que pueda ser algo para todo el pueblo, con las posibilidades de crear nuevas dinámicas, servicios y de invertir en términos de infraestructura, de instalaciones, solamente para este proyecto”, mencionó.
Hugo Concha Cantú, abogado general de la UNAM, explicó que dentro de la enorme cantidad de convenios que firma la Universidad, mediante los cuales logra la vinculación con distintos actores sociales y políticos del país, el acuerdo con el IMSS cobra una relevancia enorme.
Gran parte del objetivo que busca este acuerdo, resultado del trabajo conjunto y concienzudo entre ambas partes, es establecer las condiciones generales, y un tanto particulares que requerimos en esta colaboración, para que, a partir de eso, los convenios específicos que se celebren, sigan los parámetros establecidos en el documento que hoy se firma, precisó.
Se pretende que el convenio general se convierta en la directriz de la importante colaboración que se da entre el sector salud y el de educación superior, a través de la Universidad Nacional, añadió Concha Cantú.
La secretaria general de la UNAM, Patricia Dávila Aranda, recalcó que la salud mental es un problema multifactorial, y el interés por apoyar a los jóvenes con actividades culturales y deportivas.
La Universidad Nacional cuenta con alrededor de 107 mil alumnas y alumnos de bachillerato, buena parte de ellos menores de edad. En los planteles de ese nivel de estudios se cuenta con el apoyo de psicoterapeutas, apuntó.
Hay problemas psicoemocionales en todas las edades, pero especialmente en la adolescencia, y en ese sentido invitó a los asistentes a pensar en cómo brindar mayor ayuda a ese sector.
Alva Alejandra Santos Carrillo, directora de Prestaciones Médicas del IMSS, reconoció el inicio temprano de los problemas de salud mental, y a la adolescencia como etapa clave del desarrollo, ya que ahí se generan patrones de sueño, ejercicio y habilidades.
Recordó que se han tenido acercamientos con la Universidad, pero “queremos llevarlos más allá”. El objetivo es promover la salud mental en la comunidad educativa para mejorar su capacidad de afrontamiento en el ámbito escolar y comunitario, y disminuir los problemas respectivos.

Entre los objetivos está fortalecer las capacidades individuales y colectivas de la comunidad estudiantil para el autocuidado, la gestión emocional y la convivencia saludable mediante acciones integrales de promoción y sensibilización que favorezcan la salud mental, la inclusión y la eliminación de estigma asociado a los problemas de salud mental. Al respecto, ambas instituciones ya han emprendido diferentes acciones, pero ahora “queremos homologar y compartir experiencias”, elaborar materiales informativos, etcétera.
Asimismo, queremos favorecer la identificación y atención oportuna de factores de riesgo, a fin de prevenir o retardar el desarrollo de enfermedad mental y tratar las adicciones, detalló Alva Santos.
Rosa Amarilis Zárate Grajales, directora de la Facultad de Enfermería y Obstetricia de la UNAM, recalcó que este acuerdo era muy esperado, y más con la incorporación atinada del tema de salud mental.
La universitaria sugirió la regionalización: a partir de las necesidades que se atienden en las comunidades de bachillerato y licenciatura, canalizar por zonas (norte, sur, oriente y poniente) a las y los jóvenes para una atención más especializada, psiquiátrica, en caso necesario, y hacerlo conjuntamente, de manera institucional y organizada.
El documento establece que las acciones de colaboración entre las partes serán, entre otras, proyectos e investigación educativa y en salud, participación, desarrollo y organización de seminarios, conferencias y, en general, eventos académicos; formación, capacitación y actualización de recursos humanos a nivel profesional y de posgrado; asistencia técnica y transferencia tecnológica.
Asimismo, intercambio de personal académico, programas de servicio social, internado de pregrado y ciclos clínicos, publicaciones, desarrollo de programas de educación continua, intercambio de promociones para actividades culturales y recreativas, y validez oficial de programas académicos, entre otras.
Para la ejecución de las actividades se celebrarán convenios específicos de colaboración.
El Espacio de Orientación y Atención Psicológica (Espora) abrió sus puertas para brindar atención profesional, especializada y gratuita a las y los integrantes de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS). La iniciativa forma parte del programa “Derecho a tu Facultad” de esa entidad académica.
Durante la apertura de Espora, el director, Alejandro Chanona Burguete, expresó su complacencia por concretar este proyecto, que responde a una demanda creciente de servicios de apoyo psicológico y emocional para el colectivo universitario. “Hoy entra en operación este espacio para la atención y cuidado de nuestra comunidad, por lo que es un motivo de satisfacción para una Facultad comprometida con el bienestar integral de todas y todos”.
El director dio la bienvenida y presentó a Claudia Herrera como jefa de la sede de Espora en la FCPyS, quien estuvo acompañada por personal médico y autoridades universitarias. La también psicóloga agradeció la confianza depositada en este programa y destacó la importancia de que en el plantel se otorgue un lugar prioritario a la atención de la salud mental.