La historia en la mirada, un vistazo al pasado revolucionario

Cuando hoy tenemos la oportunidad de capturar imágenes y videos de forma instantánea con sólo presionar una pantalla, resulta difícil imaginar y entender lo complejo que era hacerlo hace más de cien años. A inicios del siglo pasado eran muy pocas las personas que podían hacer registros visuales de la vida cotidiana o de los sucesos importantes. Estaban la fotografía y los primeros ejercicios fílmicos que, vistos a la luz de nuestro presente digital, se aprecian complejos y muy limitados, pero sin duda fueron avances notables de aquella época.

Salvador Toscano, Enrique Rosas, Jesús H. Abitia y los hermanos Alva (Carlos, Guillermo y Salvador) son algunos de los pocos personajes históricos que decidieron y pudieron capturar imágenes de la Revolución mexicana, un conjunto primigenio de testimonios visuales que nos permite descubrir pasajes y personajes que han trascendido y conforman el ideario colectivo de los mexicanos sobre el conflicto civil que cambió nuestra historia.

El caso particular de los hermanos Alva destaca por su intuición y oportuna decisión de filmar sucesos tales como el encuentro entre Porfirio Díaz y William H. Taft, presidente de Estados Unidos de 1909 a 1913, cuyo material es conocido como Entrevista Díaz-Taft (1909), o el de la Revolución orozquista (1912) que contiene imágenes de la lucha revolucionaria de Pascual Orozco en el norte del país. También es memorable el seguimiento que hicieron a Francisco I. Madero en su viaje hacia la capital mexicana, así como las filmaciones de Emiliano Zapata y Pancho Villa.

Los hermanos Alva, originarios de Michoacán, dejaron el negocio familiar de fabricar bicicletas para dedicarse al cine, un oficio novedoso. Comenzaron en 1905 y para 1910, año de los festejos por el Centenario del inicio de la Independencia de México, dado su fama y renombre, se les encargó la grabación de dichas celebraciones. Dentro de ese trabajo podemos encontrar las inauguraciones del Monumento a la Independencia y del Hemiciclo a Juárez, además de desfiles y homenajes a los héroes de 1810.

Con el estallido de la lucha armada de 1910, los hermanos Alva no cesaron su labor documental. Capturaron momentos como la huída de Madero a los Estados Unidos, la toma de Ciudad Juárez y la icónica escena de Porfirio Díaz alejándose a bordo de un tren hacia el exilio, luego de renunciar a su cargo como presidente.

Dentro de este asombroso collage fílmico también podemos ver escenas de la vida cotidiana como cortejos fúnebres, personas caminando por las calles y plazas, niños que miran con curiosidad el aparato que tenían al frente, el lento paso del tren en la sierra del norte del país; además de imágenes posteriores al sismo de junio de 1911, horas antes de que Madero llegara triunfante a la capital mexicana, en las que se ven personas remover escombros, llevar a heridos o trabajando en rescates.

Las imágenes de La historia en la mirada fueron filmadas entre 1907 y 1917 y la mayor parte procede del archivo de los hermanos Alva. Según los datos de Filmoteca de la UNAM, que restauró digitalmente los materiales con apoyo del Instituto Nacional de Antropología e Historia, este material corresponde a fragmentos mostrados en el cine “como vistas durante los años de la lucha revolucionaria en México”. El documental, creado con cortos recuperados, fue dirigido por José Ramón Mikelajáuregui.

La historia en la mirada condensa distintos momentos de un cambio de época y nos permite asomarnos a algo de la vida previa al estallido revolucionario así como a diversos instantes de la lucha armada, así como constatar y reconocer parte del gran relato que conocemos acerca del origen y desarrollo de la Revolución mexicana.

Hoy Cultura en Directo.UNAM te invita a recorrer visualmente aquello que vieron y vivieron los mexicanos de hace más de cien años, desde la comodidad de cualquier dispositivo, en una versión digital restaurada y adaptada a la tecnología actual, que trasciende las barreras del tiempo.