Liliana Weinberg ingresa a la Academia Mexicana de la Lengua
Ocupa la silla X, que antes perteneció a José Pascual Buxó, profesor emérito de esta casa de estudios
Con un discurso que recorrió el género del ensayo en la cultura hispanoamericana desde la antigüedad hasta nuestros días, la ensayista, crítica literaria, editora e investigadora de la UNAM Liliana Irene Weinberg Marchevsky ingresó como miembro de número a la Academia Mexicana de la Lengua (AML).
Desde hoy ocupa la silla X, que antes perteneció al humanista y profesor emérito de esta casa de estudios José Pascual Buxó.
En la Universidad, Weinberg es investigadora del Centro de Investigaciones sobre América Latina y el Caribe (CIALC), donde ha profundizado en el estudio del ensayo como proyecto de indagación; además de profesora en la Facultad de Filosofía y Letras y en los programas de posgrado en Estudios Latinoamericanos y Letras.
En una ceremonia virtual, Gonzalo Celorio, director de la AML, le dio la bienvenida y comentó su discurso, además de mostrar ante cámara la venera, el distintivo y el diploma de la nueva integrante de la academia, en la primera ocasión que esa entidad celebra un ingreso en línea.
La búsqueda del sentido
“El quehacer del ensayo representa una forma de relación activa, entrañable y productiva del sujeto con la lengua, necesariamente abierto a los problemas del discurso y la significación, y siempre capaz de indagar, a través de sus escritos, el tema mayor del encuentro dinámico del lenguaje y la vida, la representación del mundo y la búsqueda del sentido”, planteó Weinberg.
Consideró que el ensayo se consolida como un nuevo género del discurso, en el momento de la dignidad de las lenguas maternas. “Hoy en día la posibilidad de escribir y publicar nuestras reflexiones y experiencias a partir de la lengua viva regresa con nueva fuerza en los debates contemporáneos sobre las políticas del lenguaje”.
Destacó que el ensayo reproduce, representa y tematiza el encuentro de una conciencia individual con el amplio mundo de la lengua como zona de interlocución, de amistad, de tensión o de conflicto.
Weinberg expresó que el ensayista ha encontrado un nuevo punto de apoyo para retomar y multiplicar este portentoso don de la lengua, que radica en la permanente posibilidad de nombrar, interpretar y dar sentido al mundo.
Dijo que este género en nuestros días se acerca a la tecnología y se vuelve, además de literario, ensayo fotográfico y hasta cinematográfico. “Se acerca a las cuestiones éticas, políticas, sociales, culturales y epistemológicas”, resumió.
Liliana Irene Weinberg Marchevsky es ensayista, crítica literaria, investigadora y editora en el campo de la literatura en su relación con la cultura, la tradición literaria, las ideas estéticas y la historia intelectual.
A lo largo de su carrera se ha especializado en la teoría y crítica del ensayo en general, y se ha orientado en particular al estudio del ensayo hispanoamericano de los siglos XIX y XX. Es autora de libros dedicados a ese género, así como de numerosos trabajos sobre la obra de algunos de sus principales representantes, temas y problemas.
Es doctora en Letras Hispánicas por El Colegio de México, investigadora nacional nivel III del Sistema Nacional de Investigadores, investigadora titular del CIALC, profesora de licenciatura en la Facultad de Filosofía y Letras, y docente y tutora de los programas de Posgrado en Letras y Estudios Latinoamericanos de la UNAM.