Abre sus puertas la Biblioteca Juan José de Eguiara y Eguren

La UNAM, a través del Instituto de Investigaciones Bibliográficas (IIB), inauguró la Biblioteca Juan José de Eguiara y Eguren, la cual es una ventana hacia la educación, la investigación y la difusión en torno a los estudios del patrimonio documental.

El espacio, sus repositorios y el acervo constituyen la biblioteca 139 del sistema universitario, y se ubica en la planta baja del edificio del Fondo Reservado de la Biblioteca Nacional de México, la cual está bajo custodia del IIB desde 1929.

El recinto lleva el nombre del eminente catedrático de la Real y Pontificia Universidad de México, y cuenta con un acervo de libros y revistas en formato impreso y electrónico, provenientes de editoriales universitarias, académicas y comerciales de diversas partes del mundo de habla hispana e inglesa.

Incluye 4 mil 461 títulos de libros, con 5 mil 277 ejemplares en formato impreso y 108 más en electrónico, así como 163 títulos de revistas con mil 388 fascículos.

Al encabezar la inauguración, Guadalupe Valencia García, coordinadora de Humanidades de la UNAM, externó su beneplácito “porque ahora se tiene el prodigio –como las cajas chinas– de tener, dentro de la gran Biblioteca Nacional, otra propia especializada, que le pertenece a todo el país”.

En su oportunidad, Pablo Mora Pérez- Tejada, director del IIB, dijo que con los mencionados acervos se podrán estudiar, además de la bibliografía y la bibliología como disciplinas, edición, hemerografía, prensa, patrimonio, edición digital, preservación, remediación digital, catalogación y metadatos, así como archivología, producción documental, paleografía, codicología, entre muchas otras líneas de investigación.

Hay que reconocer, agregó, que se da un paso decisivo en la consolidación de una de las disciplinas humanísticas más antiguas de la cultura: la bibliografía o aquella que estudia la cultura del libro.

Recibió específicamente el nombre de Eguiara y Eguren porque él fue el precursor al conformar lo que ahora podemos entender como la gran cultura mexicana documental, además de que su biblioteca fue el primer catálogo de un americano que inició una empresa motivado por su vocación de la letra escrita, y por la fecundidad de nuestra cultura.

“Digo lo anterior porque como pocos institutos de investigación en el mundo tenemos la singularidad de desarrollar el patrimonio documental escrito e impreso, de forma colegiada y sistemática, y con libertad de cátedra, debido a la custodia de la Biblioteca Nacional de México”, agregó.

Elsa Margarita Ramírez Leyva, titular de la Dirección General de Bibliotecas y Servicios Digitales de Información de la UNAM, confirmó que este recinto se suma al sistema bibliotecario de la Universidad de la nación, con lo que ya son 139 repositorios.

“Las bibliotecas han seguido creciendo, lejos de cerrar se abren nuevas, y a ésta la considero enigmática, por todo lo que tiene aquí para estudiar un objeto tan preciado como es el libro y el patrimonio documental de México, que además no sólo es aquel que nos da mucho por su contenido, sino también por su materialidad.”

Ramírez Leyva añadió que el libro es un ser vivo que se daña, se enferma y al cual hay que tenerle cuidados, por lo que el IIB trabaja estos temas para que se mantenga con vida permanentemente y se preserve para las generaciones futuras.

En dicho acto estuvieron también Miguel Ángel Castro Medina, secretario académico del IIB; Erik Velásquez García, coordinador del Posgrado en Historia del Arte y especialista en cultura maya; así como César Manrique Figueroa, investigador del IIB, y Édgar Otoniel Vargas Méndez, responsable de la Biblioteca Juan José de Eguiara y Eguren.

Entre los servicios bibliotecarios y los de información especializada que ofrecerá se encuentran el registro de acceso, búsqueda especializada, solicitudes de artículo de revista, servicio de préstamo interbibliotecario para bibliotecas externas, reserva de materiales, sugerencia de nuevas adquisiciones y registro para acceso remoto a la biblioteca digital.

El horario de atención de la Biblioteca será de 9 a 17 horas, de lunes a viernes, y permanecerá cerrada los fines de semana, días festivos y periodos vacacionales. Está ubicada en el edificio del Fondo Reservado de la Biblioteca Nacional, justo enfrente de la pirámide invertida del patio.