Ciencia de redes al servicio fiscal

Hallan sobrerrepresentación de empresas que evaden impuestos en comercio al por mayor, construcción y minería

Construyeron redes de facturación, mes a mes o año por año.

Las matemáticas aplicadas y la ciencia de redes ofrecen resultados de investigación en los campos más inesperados; independientemente de la temática, el requisito fundamental es contar con una gran cantidad de datos para poder trabajar.

Un equipo multidisciplinario de la UNAM y la Central European University, con sede en Austria, utilizaron ciencia de redes para detectar la evasión de impuestos entre empresas del país. El análisis fue realizado para el Servicio de Administración Tributaria (SAT) de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público del gobierno federal.

Entre sus resultados hallaron una sobrerrepresentación de compañías que evaden impuestos en los sectores económicos de comercio al por mayor, construcción y minería.

La labor conjunta fue un primer análisis en 2019 y se completó con otro en 2020. En esta colaboración participaron los investigadores Carlos Gershenson García, del Instituto de Investigaciones en Matemáticas y en Sistemas y el Centro de Ciencias de la Complejidad (C3); Carlos Pineda Zorrilla, del Instituto de Física, y Martha Josefina Gómez Gutiérrez, de la Facultad de Contaduría y Administración (FCA), todos de la UNAM, junto con Gerardo Íñiguez González, de la Central European University, con sede en Austria. Al equipo se unieron Nephtalí Garrido González y Martín Zumaya Hernández, también del C3.

“Algunos resultados confirmaron suposiciones que ya tenía el SAT, otros fueron más explícitos que sus expectativas y otros fueron cálculos que nos ayudaron a medir el tipo de evasiones que se dan y cómo funcionan. Hay muchos procedimientos y nosotros estudiamos sólo algunos de ellos”, precisó Gershenson.

Los científicos observaron algunas formas y redes de esta práctica con base en la información que examinaron, y eso les permitió hacer sugerencias al SAT para mejorar la recaudación fiscal.

“Con los elementos que teníamos llegamos a resultados sobre una evasión estimada, identificando un método que se conoce como efecto carrusel, y se ubica mediante nodos e interacciones que se van dando”, señaló Gómez Gutiérrez.

Éste implica que un contribuyente emite facturas hacia otros que van ligándose, y finalmente por el efecto carrusel regresa a él mismo, de manera directa o indirecta, y los recursos económicos llegan a ese contribuyente inicial. Se trata de operaciones simuladas.

Gómez Gutiérrez explicó que se encontró a algunos que son más proclives a efectuar operaciones intangibles que son difíciles de verificar. “Hay sectores en donde identificamos a esos presuntos sospechosos”.

Patrones detectables

La ciencia de redes es parte de los estudios científicos de los sistemas complejos. En este trabajo los expertos hicieron distintos análisis de redes.

“Estas redes nos ayudan a analizar sistemas complejos porque los nodos representan contribuyentes, y las flechas entre ellos, que son sus interacciones, indican que hay una factura de un emisor a un receptor. Entonces podemos construir redes de facturación, mes a mes o año por año, y después examinar las características topológicas de esas redes”, detalló Gershenson.

Los especialistas también hicieron una red de actividades y de sectores, en donde una compañía estaba dada de alta en una jerarquía de actividad. Los que tenían una mayor sobrerrepresentación de evasión fiscal resaltaban, así que se hizo una red de cuáles le facturaban a otros.

“Juntamos todas las empresas de un sector, seguimos sus interacciones a otro al que van, y eso nos permitió localizar las relaciones entre los más comunes”, expuso Gershenson.

Se confirmó que mucha de la evasión fiscal se hace en red, en algunos casos son los mismos individuos detrás de todas las compañías involucradas, y se comprobó que muchas comparten representantes legales o socios.

“A muchas de estas firmas las dan de alta, a veces con direcciones falsas, empiezan a facturar y luego las cierran y abren otra empresa; otras se facturan entre ellas y así evaden impuestos de sus clientes y de ellos mismos.”

La colaboración de Gómez, de la FCA, ayudó a cotejar las redes científicas con datos de la realidad, para contar con un análisis realista y equilibrado.

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