Ayuda a regular las energías limpias
Premian estudio que revisa el uso del hidrógeno verde
La investigación de Pablo Díaz y Gabriel Ascanio fue publicada por el International Journal of Hydrogen Energy
Por elaborar una innovadora propuesta para usar el llamado hidrógeno verde como regulador de energías limpias en el país, el joven Pablo René Díaz Herrera y su asesor, Gabriel Ascanio Gasca, especialista del Instituto de Ciencias Aplicadas y Tecnología, obtuvieron el Premio Hydromex a la Investigación Científica del Hidrógeno en México 2022.
Para el trabajo, Díaz Herrera realizó una comparación teórica entre la tecnología de captura de carbono poscombustión y el uso del llamado hidrógeno azul y verde (H2) como estrategias de mitigación del dióxido de carbono (CO2) en la regulación mexicana de energías limpias.
Naciones como Japón ya cuentan con automóviles impulsados por hidrógeno comprimido (líquido) capaces de viajar más de 600 o 700 kilómetros con sólo un tanque del combustible, por lo que los expertos lo ven como una ventaja sobre los eléctricos, porque su tiempo de recarga es similar al de la gasolina.
“Toyota es la empresa a nivel mundial que va más avanzada en el tema, y mucha gente se preguntaba por qué no invierte tanto en el desarrollo de vehículos eléctricos, pues van mucho más adelantados en los que usan celdas de hidrógeno, por lo que de aquí a 10 años quien no se ponga a la altura de esta marca se quedará atrás”, explicó Ascanio Gasca.
Tres escenarios
El trabajo reconocido por la Asociación Mexicana del Hidrógeno es un análisis, publicado por los expertos en noviembre de 2020 en el International Journal of Hydrogen Energy, en el que revisan tres diferentes escenarios para reducir las emisiones del gas de efecto invernadero en el marco regulatorio de México para el uso de energías limpias: una, usando una planta de captura de carbono poscombustión; y dos y tres, empleando mezclas de gas natural e hidrógeno azul o verde, con una clara visión del reto que esto representa para el usuario final, y con la mira en obtener electricidad limpia del periodo 2020-2050.
Díaz Herrera recordó que este trabajo nace gracias a que en enero de 2019 tuvo la oportunidad de viajar a un congreso en Japón en el que se destacaban los proyectos de aprovechamiento del hidrógeno, y tuvo la inquietud de saber por qué nuestro país no lo utiliza si tiene una gran ubicación de comercio y acceso a energía solar y eólica para su generación.
“Actualmente, a nivel mundial –y México no es la excepción– se produce a través de gas natural, el cual por procesos térmicos y químicos se transforma en hidrógeno, pero este cambio genera grandes cantidades de CO2, lo cual perjudica al medio ambiente, y una alternativa es obtenerlo del agua mediante electrólisis (al separar el hidrógeno del oxígeno). Dependiendo de qué tan limpia es la energía utilizada es el color que se dice que tiene, por lo que cuando se usan fuentes renovables de energía se le conoce como hidrógeno verde”, explicó el joven investigador.
El entonces estudiante de la Facultad de Ingeniería de la UNAM detalló que entre los factores que consideraron estuvo el precio del certificado de energía limpia, así como del combustible; la inversión de capital, el costo de operación y la capacidad de una planta para abastecer a los usuarios.
De los resultados, indicaron, destaca que el hidrógeno verde es económicamente atractivo a partir de un costo menor a 0.9 USD por kilogramo, pero el marco regulatorio mexicano actual no hace posible la incorporación de ninguna de las tecnologías, por lo que la norma necesita ser reformada a fin de definir nuevos criterios técnicos y administrativos para promover la entrada al mercado de estas tecnologías al país.
Los investigadores añadieron que a raíz del estudio la Comisión Federal de Electricidad mostró interés por un proyecto de ciclo combinado, y se anunció la intención de desarrollar una generadora solar, posiblemente en Sonora, además de hacer mezclas de hidrógeno con gas natural.
Al implementar el uso de esta tecnología se podrán comenzar a abatir los costos de producción del hidrógeno verde y su precio se reducirá, pues “al inicio esta tecnología es relativamente costosa por su puesta en marcha, pero con el paso de tiempo, y al mezclar el hidrógeno con gas natural, el precio descenderá considerablemente, con un impacto muy favorable para el medio ambiente”, enfatizó Ascanio Gasca.