Arranca el cine en la UNAM

En su programa de actividades para los meses de marzo, abril y mayo, la Dirección General de Difusión Cultural de la Universidad de México ha incluido esta vez su Primera Temporada de Cine Internacional.

Junto a la música, la literatura o las artes plásticas, el cine ocupa, con sus sesenta años de existencia, un sitio destacado entre las demás ramas de la cultura y el arte contemporáneos.

Al ocuparse del cine, esta lumínica y vertiginosa forma de expresión propia de nuestro tiempo, la Universidad no puede olvidar el papel que le corresponde en el terreno de la orientación cultural. Si en el cine abundan las películas de escaso valor artístico y humano que las distribuidoras comerciales difunden sin medida, es necesario entonces organizar programas selectos que permitan al público contemplar de manera ordenada las grandes obras del cine.

El cine ha creado, como otras especialidades, un lenguaje singular, una técnica. El cine cuenta con una corta pero rica tradición artística: dramaturgos, pintores, literatos, hombres de ciencia, actores, músicos, han empleado buena parte de su existencia en hacer de él un nuevo género expresivo, capaz de forjar un testimonio adecuado de la compleja y acelerada vida del siglo XX.

El poder extraordinario de difusión que posee el cine, hace pensar seriamente en las repercusiones negativas que una cinematografía despistada o deshonesta puede tener en la sociedad moderna. La irresponsabilidad de muchos cineastas, ha sido causa directa de una serie de mitos y deformaciones de la realidad profundamente nocivas en el aspecto educacional.

La Universidad ha decidido reunir, por estas razones, una serie de películas clásicas, acompañadas de otras cintas modernas con algún interés histórico o artístico, para ofrecer a los universitarios un panorama certero de lo que el cine ha aportado a la cultura desde su nacimiento.

En su primera temporada de cine, la Dirección de Difusión Cultural ha programado films de diferentes países del mundo que los estudiantes podrán admirar, con la sola presentación de su credencial de alumnos, en el Auditorio de Humanidades de la Ciudad Universitaria.

La temporada de cine se inició el lunes pasado con la película “Luces de la Ciudad”, obra notable de uno de los más grandes actores y creadores que han iluminado la pantalla: Charles Chaplin, a, quien se debe, junto a Einsenstein, Clair, Pudovkin, Griffith, etc., el perfeccionamiento de este portentoso idioma del celuloide que hoy invade el mundo.

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