Creatividad, respuesta al confinamiento en jornada prolífica de arte

Cuerpos migrantes, tema y eje de la reflexión y contenidos de esta segunda edición virtual

Talleres Libres y Recreativos. Foto: Danza UNAM.

Como cada año, la UNAM celebra este 29 de abril el Día Internacional de la Danza. En esta ocasión, en el contexto Covid-19, se realizará hoy una segunda edición virtual desde las 10 de la mañana hasta las ocho de la noche, por las plataformas de Facebook e Instagram de Danza UNAM.

Evoé Sotelo, titular de esta instancia cultural universitaria, recordó en entrevista las condiciones en que se dio la primera edición virtual. “Resultó muy complicada, dado que modificamos totalmente en cuestión de días la programación que originalmente sería presencial. Proceder a las cancelaciones fue muy doloroso tanto para nosotros como para los artistas, con la promesa de que en cuanto se dieran las condiciones favorables armaríamos una celebración presencial incluyéndolos.

“Todos lo entendieron. Hicimos un día internacional donde intentamos visibilizar la situación de confinamiento de manera creativa, lúdica e inteligente por parte de los artistas. Nos orientamos a expresar el cuerpo como un espacio, un territorio de libertad en sí mismo, pretendimos dejar en claro que aun en un espacio físico reducido, el cuerpo tiene múltiples maneras para expresarse plenamente y con vitalidad. También quisimos dejar testimonio de que estamos confinados, pero vivos.”

Luego de este breve recuento, Evoé Sotelo describió las propuestas para la segunda edición virtual: “El lema es cuerpos migrantes, que nos va a acompañar todo el año y será eje de la reflexión y generación de contenidos. Nos interesa entender el cuerpo como espacio de movilización continua y de transformación. Hablaremos de la migración no sólo en términos geográficos, sino entendida además desde múltiples lugares: migración del pensamiento, de cómo cambiamos nuestra forma de pensar; migración de nuestro cuerpo físico, de cómo se transforma éste al migrar, por ejemplo, de un género a otro”.

Serie televisiva

Sotelo anunció el estreno de la serie televisiva de 16 episodios Cuerpos migrantes, que produce Danza UNAM con TV UNAM, y en la que se parte de la idea de pensarnos como cuerpos en continuo traslado. “Es un acercamiento a las vidas y trayectorias de distintos personajes, cuyos cuerpos aportarán la más sutil información sobre sus itinerarios, sus estados emocionales, psicológicos y fisiológicos”.

Destacó la participación de bailadores y bailadoras de los T, que estarán durante toda la jornada con el programa Territorios Bailados.

Mencionó otro de los estrenos que forman parte de la programación: el ciclo Conversaciones en Fuenlabrada. Un Cuerpo como Día Derramado, una charla en vivo entre la reconocida bailaora y coreógrafa de flamenco María Pagés y sus colegas Blanca Li y Cesc Gelabert; además de otro de seis encuentros que el Centro Coreográfico María Pagés y Danza UNAM organizan conjuntamente.

Invitó a seguir la presentación de Cristina Maldonado, prestigiada coreógrafa y docente en la Academia de las Artes Escénicas de Praga, quien dará dos funciones de la pieza Pócima visual 01: c.o.n.t.i.n.u.u.m, “una obra en la que reimagina los medios de comunicación para despertar al cuerpo y encontrarnos con el otro”.

La programación se enriquece con los proyectos de casa: el Taller Coreográfico de la UNAM (TCUNAM) y la Compañía Juvenil de Danza Contemporánea de la UNAM (DAJU). La Cátedra Extraordinaria Gloria Contreras en Estudios de la Danza y sus Vínculos Interdisciplinarios presenta la mesa Diálogos Vespertinos para una Antropología del Cuerpo Danzante: Racismo y Expresión Dancística, con la intervención de Paola Marugán (España) y Alberto Montes (México).

El TCUNAM vuelve a Ciudad Universitaria con la función de gala Al aire: solos y duetos en CU, con una actuación en live streaming. Además, se estrena la obra Partitura fragmentada, cuerpo cotidiano, una colaboración entre DAJU y la Orquesta Juvenil Universitaria Eduardo Mata, coreografía en la que se entrecruzan la labor de los músicos y de los bailarines de la UNAM, utilizando un lenguaje visual fragmentado que amplía el terreno de nuestra propia cotidianidad. “Queremos hacer visible la capacidad de vinculación, comunicación y experimentación entre nuestras compañías juveniles”, concluyó Evoé Sotelo.

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