En duda, la reforma migratoria en EU

Hay esperanzas para el cambio, pero también muchos obstáculos, señalan especialistas durante conversatorio

Con la presidencia de Joe Biden en Estados Unidos hay expectativas entre los grupos migrantes para que se concrete una reforma migratoria que los favorezca, pero el vecino país se enfrenta a un Congreso dividido que dificultará el proceso, señalaron especialistas de la Universidad.

“Hay esperanzas para el cambio, pero también hay muchos obstáculos. En estos primeros días de la administración Biden nuevas políticas en favor de la migración han sido anunciadas y hay propuestas legislativas, pero no sabemos que tantos avances vamos a tener, no por falta de ánimo gubernamental, sino de poder en el Congreso, que está dividido casi en partes iguales, con 50 senadores republicanos y 50 demócratas, más el voto que determina la mayoría, que es el de la vicepresidenta Harris”, afirmó Kalman Resnick, profesor externo de la Sede UNAM-Chicago (Escuela de Extensión Universitaria) y recipiendario del Reconocimiento Alfonso García Robles de la UNAM en 2017.

El abogado estadunidense explicó que el proceso legislativo es muy difícil en Estados Unidos, porque para cambiar las leyes migratorias hay que tener la mayoría de votos en la Cámara de Representantes y 60 votos en el Senado.

“Actualmente hay que ganar los votos de por lo menos 10 republicanos, posiblemente más, para poder modificar las leyes y tener una reforma migratoria”, precisó.

Durante el conversatorio virtual El Nuevo Panorama Migratorio en los Estados Unidos, organizado por la Facultad de Derecho (FD) y la sede universitaria en Chicago, el director de la FD, Raúl Contreras Bustamante, recordó que México ocupa el segundo lugar mundial en emigración con casi 12 millones de personas, solamente detrás de la India.

“Es gente que ha salido hacia otras naciones en búsqueda de mejores oportunidades. En la Unión Americana los estados de California, Texas, Florida, Nueva York, Nueva Jersey, Georgia e Illinois tienen las poblaciones más altas de migrantes indocumentados mexicanos. Se calcula que la migración de latinos en el vecino país es mayormente de origen mexicano”, añadió Contreras.

Resnick apuntó que hay otro problema con las cortes, porque el expresidente Donald Trump nombró a muchos jueces federales, y son puestos de por vida. “Hemos visto que en las cortes hay suficiente fuerza entre los trumpistas para tratar de impedir avances en las políticas administrativas de la administración de Biden”.

Como ejemplo, citó que Biden anunció una moratoria de cien días en las deportaciones a personas que fueron convictos graves, por lo que el procurador general de Texas lo demandó en la corte de distrito en ese país, y el juez dispuso una orden para que quedara sin efecto la moratoria.

Electorado dividido

Contreras expuso que la reforma migratoria se enfrenta a un electorado dividido, dentro del cual los demócratas reconocen que el tema migratorio no es electoral.

Mencionó que allá no hay voto directo de los ciudadanos, sino un complejo sistema de voto electoral, y propuso para Estados Unidos la instauración de un organismo semejante al Instituto Nacional Electoral que tenemos en México.

Resnick sugirió crear coaliciones entre la comunidad latina para intervenir de manera organizada, y destacó que en la economía de aquella nación es esencial la mano de obra de los migrantes, con quienes hay una obligación moral.

El estadunidense dijo que para México también son muy importantes los migrantes en Estados Unidos, pues las remesas que envían a nuestro territorio son más cuantiosas que las ganancias por petróleo o turismo.

En el conversatorio, Francisco José Trigo Tavera, coordinador de Relaciones y Asuntos Internacionales de esta casa de estudios, aceptó, a propuesta de Resnick, que un grupo de alumnos de Derecho hagan estancias en la UNAM-Chicago para prepararse y participar en la problemática de los migrantes.

México ocupa el segundo lugar mundial en emigración con casi 12 millones de personas, solamente detrás de la India.
También podría gustarte