Fundamental, la investigación en ecosistemas y sustentabilidad
“Sustentabilidad no es una moda, ni una aspiración, la debemos considerar un objeto de estudio que se puede investigar y transmitir a la sociedad para llegar a niveles cada vez más altos de bienestar, por eso es importante la investigación que hacemos en este Instituto, además de proyectarla a nivel nacional y ser un referente internacional”, enfatizó.
Recordó que la sustentabilidad es altamente coincidente con los Objetivos de Desarrollo Sostenible –impulsados desde hace tiempo por la Organización de Naciones Unidas–, e implica bienestar, igualdad de género y oportunidades, así como eliminar las diferencias, sobre todo en México.
El experto en ecología de fuegos detalló que desde el IIES se trabaja en temas relevantes como el manejo de plantas, entendimiento de procesos vegetales, el uso de biocombustibles y educación ambiental. También se espera incorporar nuevas líneas de investigación, incluir más investigadoras y reducir las brechas de género y la edad promedio del personal de la institución.
En entrevista mencionó que entre las nuevas líneas de investigación que se planea impulsar en el Instituto están la ecología y sustentabilidad urbana, no sólo desde el punto de vista arquitectónico o geográfico, sino entender procesos ecosistémicos que ocurren en sistemas urbanos generados por el hombre, que deben ser revisados en sus dinámicas para lograr su integridad y que permitan el bienestar de las poblaciones.
Otros temas relevantes son la historia socioecosistémica y la ambiental, estudiadas desde la formalidad académica y que permitan fortalecer el trabajo de especialistas en ciencias sociales con una visión interdisciplinaria que lleve a la sustentabilidad. Ejemplo de ello es el manejo del agua, debido a que el uso que se ha hecho del recurso tiene un amplio panorama de mejora.
Pérez Salicrup detalló: “somos uno de los pocos países del mundo donde se construye un nuevo fraccionamiento y las aguas negras van a dar a cuerpos superficiales de agua, casi sin tratamiento, por lo que el IIES cuenta con expertas que abordan como parte de su labor el acceso justo al agua”.
“Necesitamos agua para sobrevivir, y hacer prácticas más sustentables de ésta es un tema que toca muchísimas aristas, y ese es uno de los retos que tenemos en el Instituto: cómo hacer que una persona que tiene formación en sociales y otra que labora en ingeniería hídrica se comuniquen para trabajar, y que logren generar hallazgos que no se encontrarían en cada una de estas disciplinas actuando por separado”, reflexionó.
A esto se suma el avance de ecotecnologías, por eso ya se desarrollan en el Instituto –hoy se cuenta con un investigador y dos becarios–, pero es importante incluir a más personal en esas áreas, que implementen nuevas ecotecnologías que se puedan aplicar en beneficio de la sociedad, destacó.
Acabamos de vivir una coyuntura que afectó a todo el mundo, una crisis sanitaria que tuvo una dimensión ambiental que no siempre se reconoce. Se habla de cuestiones médicas, económicas, de las consecuencias sobre el bienestar de las personas, e inclusive de la dimensión psicológica; pero debemos reconocer que una buena parte de lo que ocurrió con el origen de esta pandemia tuvo mucho que ver con la desaparición de ambientes naturales, con la deforestación, con la pérdida de conectividad de los ecosistemas y con cómo los manejamos, y este tema se aborda desde la sustentabilidad.
Pérez Salicrup precisó que cada uno de estos temas implica el desarrollo de redes que interactúan unas con otras, lo que permite que las investigaciones que realiza el IIES sean locales, pero el conocimiento generado tenga implicaciones globales.
Actualmente, explicó, está por terminarse de construir una serie de cámaras de ambientes controlados (en la azotea del edificio) con las que será posible –como su nombre lo indica– controlar variables como la humedad relativa, la temperatura, y otras características que permitirán indagar qué ocurre con diversos tipos de plantas ante condiciones de cambio climático y a partir de ahí hacer proyecciones que hagan posible entender las consecuencias de lo que está pasando hoy en día a nivel planetario.
El Instituto fue acreditado en 2015 y en 2025 cumplirá una década de trabajo, por lo que Pérez Salicrup espera que hacia esa fecha se cuente con una entidad fortalecida y renovada.