Pedro Zavala, Premio Mauricio Achar de Novela

Estímulo para difundir las nuevas voces de la literatura mexicana

Estudiante de doctorado en Estudios Latinoamericanos.
Estudiante de doctorado en Estudios Latinoamericanos.

Por su libro All in, Sinatra, Pedro Zavala Chaparro, estudiante de doctorado en Estudios Latinoamericanos de la UNAM, recibió el Premio Mauricio Achar de Novela, Literatura Random House 2018, el cual otorgan Librerías Gandhi y Literatura Random House con el propósito de apoyar y difundir las nuevas voces entre los creadores mexicanos.

En realidad es una obra sobre los paraísos perdidos, las cosas que amamos y que perdemos por obligación o por hacerlo como trabajo.

Es sobre la vida de un profesor que decide suicidarse en Las Vegas; por ahí se abre una puerta a la vida social y económica de México y América Latina, en el entendido de que tal vez en los espacios más iluminados, fantásticos y agraciados se concretan las tragedias más grandes de este mundo. El nombre de la novela es porque cuando al protagonista, Génesis Montesinos, se le pasan las copas cree ser Frank Sinatra.

“Soy licenciado en Filosofía y después me entró la inquietud de ser latinoamericanista. Creo que debido a mi formación la Universidad me ha dado varias herramientas y elementos para poder mirar de forma crítica la realidad de América Latina y mexicana”, dijo Pedro Zavala.

FIL de Guadalajara

Como parte del premio esta novela se publicará y habrá un incentivo económico. Su presentación oficial en sociedad será la FIL de Guadalajara. “Pienso que este libro combina asuntos de las realidades mundial y nacional, además de algunos de índole existencial que nosotros podemos tener en torno a nuestras pasiones, elecciones vitales, por los sueños y las metas. Preguntas que en algún momento nos planteamos y pueden convertirse en cargas pesadas. De modo que se le pueden dar varias lecturas a este texto y creo que eso y la cualidad de tener un ritmo trepidante es lo que se conjugó para obtener este galardón”, señaló.

La Universidad me ha dado ese espacio de calidez, cariño, rigurosidad, disciplina, de venir y sentarme en una biblioteca para poder leer en calma o escribir. Son cosas que se agradecen porque no están al alcance de todas las personas y, en ese sentido, desde los profesores que han sido muy buenos conmigo y han sido parte de mi formación que no sólo se da en las aulas sino también en la crítica de los textos, en las charlas que pueden haber en un café, en una comida. Sobre todo las herramientas que me aportan, las visiones críticas que de algún modo me hacen sentir agradecido con esta institución a la cual tengo el honor de pertenecer.”

Investigación

La investigación, abundó, fue parte importante para describir situaciones, entornos, problemáticas nacionales y globales. “Y esto nos la da en buena medida el ser alumnos universitarios, es parte de nuestra formación leer, acercarse a ciertos temas o bibliografías y después el determinar cómo crear con esa información, ir más allá del mero dato, del simple hecho y cómo la literatura y el arte sí le permiten a uno salir de esa jaula en la que a veces se llega a convertir el mundo de la investigación y la academia. Creo que es difícil conjuntarlas, pero en este caso la parte creativa me ayudó a dar ese salto a algo nuevo que es la novela”.

Para él, señaló, lo importante es que la obra encuentre sus lectores, las personas que puedan describirla en sus lecturas.

“Si alguien cree que su vida está en balance y perfecta armonía, mejor que ni se acerque al libro, creo que está dirigida a las personas que se preguntan qué con mi vida, qué con mi existencia, qué con mi yo viviendo este momento de la realidad en concreto.

“Más allá de edades pienso que es para quienes quieren seguir profundizando y llegar a ese caos donde vive el autor para intentar responder o hacerse más preguntas sobre sí mismo.”

También podría gustarte