¿Por qué se da el escapismo emocional?

Un síndrome se define como un conjunto de síntomas característicos de una enfermedad, por tanto no existe el síndrome de Houdini; sin embargo, es una idea que se utiliza para describir el comportamiento de las personas que actúan emocionalmente como unos “escapistas”.

“No es un concepto que se defina teóricamente y tampoco proviene de alguna ciencia. Lo que sucede es que en los últimos años hay palabras que se ven en las redes sociales y la sociedad comienza a hacer uso de ellas para describir ciertos comportamientos”, asegura Aidee Elena Rodríguez Serrano, académica de la Facultad de Psicología de la UNAM.

Las palabras se emplean de acuerdo con su contexto; por ejemplo, Houdini se utiliza para visibilizar la desaparición de una persona que se va sin dar explicaciones, comportamiento que ya se había visto en otros momentos históricos, pero era llamado de otra forma y las personas conocían su significado porque son términos que se popularizan. Un ejemplo de ello es: “se fue por los cigarros”, puntualiza.

En este caso, refiere, el comportamiento de Houdini se presenta más de forma presencial que en cuestiones digitales como las redes sociales y, como se mencionó, es cuando las personas se van sin dar explicaciones. Hay casos en los que tiempo después regresan de la misma forma.

Houdini no solamente se da en relaciones de noviazgo, precisa la experta, también se puede presentar en contextos familiares o de amistad, cuando dejamos de saber sobre las personas de un momento a otro.

Diferentes circunstancias

De acuerdo con la especialista, hay diferentes circunstancias de la vida por las que las personas toman la decisión de desaparecer como egoísmo o desinterés, pero una de las más relevantes es que no se atreven a enfrentar ciertas situaciones, y les resulta más fácil irse que solucionar o aclarar. En este sentido, añade, en otras ocasiones prefieren huir que vivir el momento de despedida.

Las personas aplican el comportamiento de Houdini porque aprenden ciertas características en el contexto familiar, que es donde se les enseña la manera de vincularse con los demás y la forma de enfrentar y resolver problemas, enfatiza la especialista. Entonces, subraya, si en la casa se solía ocultar temas complicados en vez de hablarlos, son situaciones que los individuos suelen interiorizar y como consecuencia actuarán siguiendo esos patrones de conducta a lo largo de su vida.

“Además de que las personas no cuentan con las herramientas psicológicas para actuar ante ciertas circunstancias y las evaden, su comportamiento puede estar relacionado con algunos rasgos de personalidad como el tener dificultad para hablar, vergüenza o incomodidad para expresarse o no quieren enfrentar lo que les pueda decir alguien más”, explica Rodríguez Serrano.

Pero, ¿qué pasa con esa otra persona? La especialista afirma que quien sufre la desaparición está viviendo un abandono, un momento de inseguridad e incertidumbre porque se cuestiona constantemente haber sido la causa del “escapismo”. Además tiene miedo porque no sabe si le pasó algo, si está bien o si está viva.

Houdini es un comportamiento repetitivo, los individuos suelen hacerlo con otros vínculos, y como consecuencia, al no contar con redes de apoyo, se les dificultará construir relaciones sanas, además no podrán cerrar ciclos de su vida y esto puede desencadenar en que se sientan desolados. Dentro de los daños más graves está el consumo de sustancias ilegales, recalca.

Son pocas las personas que tienen este comportamiento y buscan ayuda psicológica, afirma Rodríguez Serrano. “Si prefieren evitar que confrontar, es importante que busquen ayuda de profesionales de la salud mental, quienes dan las herramientas para la resolución de conflictos y tener comunicaciones más asertivas y podrán aprender a construir relaciones sin miedo al compromiso”, finaliza.