Presentan el libro Uruchurtu, el regente de hierro

Gobernó Ciudad de México 14 años, entre 1952 y 1966; destacó por su tendencia conservadora, su mano dura y su control férreo sobre las expresiones culturales de los teatros y cabarets

Personaje poderoso y polémico que gobernó Ciudad de México durante 14 años, entre 1952 y 1966, Ernesto P. Uruchurtu fue un político del Partido Revolucionario Institucional (PRI) que destacó por su tendencia conservadora, su mano dura y su control férreo sobre las expresiones culturales de los teatros y los cabarets.

Recordado con luces y sombras por ser el único regente que gobernó bajo el poder de tres presidentes (Adolfo Ruiz Cortines, Adolfo López Mateos y Gustavo Díaz Ordaz), este abogado dejó una profunda huella urbana reconocible hasta nuestros días, por ejemplo en el entubamiento de los ríos de la Piedad y Churubusco, o la construcción del Periférico desde el Toreo de Cuatro Caminos hasta Cuemanco, en Xochimilco.

Manuel Perló Cohen, investigador del Instituto de Investigaciones Sociales (IIS) de la UNAM, es el autor del libro Uruchurtu, el regente de hierro, un detallado análisis que, en dos tomos y más de 800 páginas, profundiza en la figura del político y hace un retrato de lo que fue en aquellos años la capital del país.

La obra, editada por la UNAM, contiene en el tomo 1, Orígenes y primera regencia, y en el 2, Auge, caída y exilio. Ambos ahondan en la personalidad y el contexto del personaje, así como en los cambios de la época en nuestra capital.

Durante la presentación del libro, celebrada de manera híbrida desde el auditorio del IIS y moderada por Marta Lamas, investigadora del Centro de Investigaciones y Estudios de Género (CIEG), Roger Bartra Muriá, investigador de aquella entidad, subrayó que la obra de Perló es una excelsa investigación de un caso revelador de la naturaleza del régimen priísta, un sistema al que calificó de despótico, en el que el regente fue también secretario de Gobernación con Ruiz Cortines.

“Uruchurtu cerró centros nocturnos; le mandó poner un taparrabos a la Diana Cazadora; persiguió a los indígenas que vendían naranjas en las calles, así como a los comerciantes informales; fue un político anticomunista, anticardenista y antisemita”, señaló.

Bartra añadió que, entonces, en la capital del país no había fuerzas sociales ni políticas que determinasen el curso de esta última, pues aquí todo dependía de la presidencia de la República y de las fuerzas que operaban a escala nacional. “Uruchurtu no se dejó controlar por grupos locales y sostuvo un urbanismo vertical y autoritario”, comentó.

Hombre autoritario y no corrupto

En su oportunidad, María del Carmen Collado Herrera, investigadora del Instituto de Investigaciones Dr. José María Luis Mora, resaltó que el libro de Perló es una gran investigación del regente, “un hombre autoritario, que no fue corrupto pero que se caracterizó por el cierre de bares, cabarets y el acoso a homosexuales y prostitutas”.

También recordó que se opuso al desarrollo de nuevos fraccionamientos en la capital del país, lo que propició el crecimiento de zonas conurbadas en el Estado de México.

“Fue un hombre que no echó mano de sus contactos políticos para enriquecerse, pero como regente se sometió a las prioridades del presidente de la República”, comentó la historiadora.

Por su parte, Antonio Azuela de la Cueva, investigador del IIS, sostuvo que el libro es una investigación de largo aliento que va a quedar como referente. “Es una manera de mirar a Ciudad de México”, indicó.

Azuela dijo que Uruchurtu se distinguió por la contención urbanística, que no dejó crecer a la ciudad, pero que se concentró en evitar conflictos con dos frentes: el de los fraccionadores y el de los sectores populares.

“En el libro hay una polémica sobre si fue un urbanizador y también ahonda en su caída y exilio”, afirmó.

En su participación, Manuel Perló acotó que intentó hacer un trabajo objetivo, con información documentada. “Es un libro crítico con el personaje, que espero genere discusión y debate”.

Uruchurtu encabezó mejoras en la ciudad como la creación de parques, mercados y museos, pero limitó expresiones culturales en obras artísticas.

Para conocer a fondo su personalidad y las políticas de la época en Ciudad de México, se recomienda el libro Uruchurtu, el regente de hierro, una edición de la UNAM.

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