“Los colores los siento desde niño”

Más de la mitad de su vida ha estado vinculada al Club Universidad Nacional. Desde los 10 años interiorizó los colores de Pumas en su entorno. Trece años más tarde registra 31 partidos como profesional, pero aún con el sueño de ser un referente auriazul. “Los colores los siento desde niño. Quiero y amo con todo mi corazón a este club, el que me dio la oportunidad de ser futbolista”, aseguró Pablo Bennevendo.

Su padre fue el pionero que le transmitió el gusto por jugar al futbol. “Él me inculcó el amor a este deporte desde que era niño. Me cargaba y yo pateaba la pelota. Desde entonces le tomé más cariño, empecé a jugar en la escuela desde los tres o cuatro años. De a poco empecé a seguir el sueño de ser futbolista”, añadió.

Para Pablo hubo un partido en su infancia que le cambió la vida. Vivía en Cuernavaca, Morelos, y jugó ante una de las categorías de fuerzas básicas de Pumas. “Nunca sabes quién te está mirando en cualquier partido. Al final del juego le dijeron a nuestro entrenador que querían a cinco niños en su equipo, y yo era uno de ellos”.

Lo innegociable es el hambre de querer crecer, llegar y quedarte”

A partir de su llegada a Pumas, Bennevendo jugó en todas las categorías de fuerzas básicas, desde la sub-13 hasta la sub-20, pasó por la filial que Pumas tuvo en tercera división, incluso sumó 29 partidos con Pumas Tabasco, todo antes de llegar al primer equipo, donde debutó en el Clausura 2021 ante Guadalajara.

“Durante el proceso maduras mucho. Es complicado, pero el triunfo y la gloria los disfrutas de mejor manera. Como futbolista, el cumplir el proceso en cada categoría me ayudó a madurar mucho más. Siempre tienes experiencias nuevas en categorías más difíciles, así llegas mejor preparado a primera división”, explica el canterano.

Actualmente, el jugador auriazul es uno de los futbolistas surgidos de las fuerzas básicas que compiten cada semana por estar en el equipo titular. Durante este Clausura 2023 disputó 12 partidos, ocho de ellos en el once inicial. “Lo innegociable es el hambre de querer crecer, llegar y quedarte. Si estás en Pumas debes tener garra en tu día a día, debes ser constante y dedicado con tu trabajo”.

Entre las metas que contempla el lateral felino se encuentran consolidarse en Pumas y emigrar al extranjero, específicamente al futbol europeo. Además, tiene en la mira formar parte de la selección mexicana. “Mi sueño es dar el salto al futbol en otro país. También quiero representar a México en un torneo internacional. Sé que es un trabajo de constancia y esfuerzo, me gustaría cumplirlo en el futuro”.

Además de llevar una trayectoria dentro del futbol, Bennevendo estudia la licenciatura de Administración en Negocios. “Ya estoy por terminar mi carrera. A mí me gustan los números y las finanzas, también administrarme, y quiero poner un negocio propio, es uno de mis objetivos fuera del futbol”, comenta.

Con nostalgia, Bennevendo se acuerda del niño que llegó a la Cantera con ilusiones y sueños, mismos que ha ido cumpliendo durante los últimos años. “A ese niño le diría que no deje de divertirse, que siga soñando lo más alto posible, que no se dé por vencido pese a los momentos difíciles, porque los superará”.